La Xunta ignora a Monforte en las ayudas al sector de la pizarra

Monforte, el segundo municipio en población de la provincia de Lugo, es uno de los afectados por la crisis del sector de la pizarra que azota a todo el Val de Lemos y la comarca de Valdeorras, en Ourense. En Monforte viven decenas de trabajadores sin empleo por el cierre de pizarreras o víctimas de regulaciones laborales. Los damnificados esperaban que la Xunta fuera fiel a su compromiso de primar a los municipios de Lemos en los Planes de Cooperación para el Fomento del Empleo. Pero no. Resulta que no consiguieron ni un solo contrato y el alcalde monfortino, el nacionalista Severino Rodríguez, estalló: "Sentimos que somos víctimas de un ataque frontal a Monforte inaceptable, que nos obligará a actuar hasta las últimas consecuencias".

Traballo otorgó a Quiroga 56 contratos a parados del sector de la pizarra

El alcalde monfortino estudia demandar a la Xunta por prevaricación

La situación actual arranca en 2008, cuando el sector de la extracción de pizarra en la comarca de Val de Lemos comenzó a tocar fondo y unos 400 operarios se quedaron sin trabajo. Como consecuencia, el Gobierno bipartito, de la mano del por aquel entonces conselleiro de Traballo, Ricardo Varela, impulsó el Plan Laxa, seis millones de euros para contratar a 411 trabajadores en paro procedentes del sector y censados en Quiroga, O Barco, Folgoso y Ribas de Sil. Aunque el convenio, según el alcalde monfortino Severino Rodríguez, admitía la posibilidad de una prórroga si persistían las adversas condiciones laborales, la actual Xunta descartó la posibilidad. La versión del Ejecutivo de Feijóo consiste en que son muchos los sectores en crisis y, así, que no se puede poner en marcha un plan específico para cada uno.

A raíz de la nueva situación, una comisión integrada por los alcaldes de Quiroga, Monforte y O Barco se reunieron con el director general de Emprego, Andrés Hermida, al que expusieron el "problema económico" de la zona. El representante gubernamental respondió que todo se resolvería a través de los planes de cooperación. El posterior entendimiento entre la Xunta y la comisión de regidores, según el alcalde monfortino, dio lugar a una orden en la que se contemplaba que habría una "especial sensibilidad" con los ayuntamientos que tienen censados trabajadores en paro de la pizarra. Con esa premisa, cada uno de los consistorios dirigió sus respectivas solicitudes para acceder a los planes de cooperación, luego valoradas en las delegaciones provinciales de la Xunta.

Sin embargo, en la resolución final los solicitantes se encontraron con que a Monforte le otorgaron cinco trabajadores en el apartado de violencia de género y una persona para el Banco de Tempo, pero ninguno vinculado a la crisis de la pizarra. Y eso a pesar de que por este concepto habían tramitado 39 solicitudes, que contrastan con los 56 contratos que sí le otorgaron al Ayuntamiento de Quiroga. Cuando el alcalde de Monforte se interesó por esta situación, la explicación que recibió fue la existencia de una circular interna en la que se optaba por priorizar a los ayuntamientos donde estaban asentadas las empresas de la pizarra.

Severino Rodríguez no sólo no admite esta explicación, sino que sostiene que tal circular interna "no tiene validez", dado que no estaba recogida en las bases para la petición de solicitudes. Por este motivo, el consistorio monfortino estudia la posibilidad de demandar "por prevariación" a todas aquellos que participaron en el reparto de los planes de cooperación e insiste en que "es un ataque frontal a Monforte". "No es un problema político, es un problema de justicia y legalidad", agregó.

Mientras tanto, desde la Consellería de Traballo aclaran que el Plan Laxa se planteó especialmente para 2009 y "sólo para esa anualidad", por lo que finalizó en diciembre del año pasado. La Dirección Xeral de Promoción de Emprego indicó a los municipios afectados que los planes de cooperación de 2010 tendrían "especial consideración" con los lugares afectados por el cierre de explotaciones de pizarra.

Traballo asegura que para el reparto de ayudas se tuvieron en cuenta los datos del paro en los últimos meses y su división por sectores, para lo cual partieron de la cifra de 1.547 parados en Monforte en mayo de 2010. De ellos únicamente 31 estarían vinculados a la actividad extractiva de pizarra, lo que significa un 2% de los desempleados totales. Contrastan este dato con el de Quiroga, donde aseveran que de los 319 parados de este municipio, 70 son de la pizarra, el 22% del total. "Estas cifras", puntúan desde la consellería, "sirvieron de base para la valoración y posterior distribución de los planes de cooperación en esta comarca".

Aunque no se entra en las supuestas ilegalidades que argumenta el mandatario de Monforte de Lemos, desde el departamento de Beatriz Mato también precisan que Monforte es el segundo ayuntamiento de la provincia que percibe mayor dotación económica procedente de los planes de cooperación, por delante de "incluso" de Lugo y sólo por detrás de Quiroga.