La Bolsa vuelve a los 9.500 puntos

La Bolsa española ha perdido en esta semana prácticamente lo mismo que ganó en la anterior, con el agravante de que ahora hay mucha más incertidumbre y, por tanto, menos perspectiva de beneficio a corto plazo.

El Ibex 35 termina este ciclo de sesiones en 9.535,00 puntos, con una caída del 4,38%, y una sensación enorme de desconcierto entre los inversores. Si en las primeras sesiones de la semana era la salud de los grandes bancos franceses y alemanes lo que preocupaba a los inversores, la decisión de los dos principales partidos políticos españoles de revisar en profundidad todo el sistema eléctrico español en los próximos meses, ha causado estragos.

La posibilidad de que se revisaran, con carácter retroactivo, las ayudas a algunas energías renovables, ya había puesto al sector, y a los inversores, "patas arriba", pero el anuncio de que la revisión va a ser más a fondo y de que va a afectar al conjunto del sistema eléctrico, ha provocado fuertes caídas en las cotizaciones.

Por el momento, la revisión de tarifas prevista para julio, y con la que contaban las compañías, no se llevará a cabo, razón por la que algunas casas de análisis ya han recomendado a sus clientes "evitar" por el momento las compañías eléctricas expuestas al mercado español, es decir, a la revisión.

La cuestión de la salud de algunos grandes bancos franceses y alemanes saltó por la acumulación de deuda de los países de la periferia en sus carteras, aunque en el mercado se opina que hay algo más, cuando se resisten a que se hagan públicos los resultados de las pruebas de estrés. Sin embargo, no fue sólo la banca de los vecinos del norte la que causó preocupación, ya que aún coleaba la cuestión del impacto de la deuda inmobiliaria de la banca española. La agencia Moody's vino en apoyo de la banca española al anunciar que el 75% de las pérdidas posibles ya estaba cubierto, lo que limita mucho el riesgo, al menos en ese aspecto.

Con todo, la cuestión de fondo que se plantean los inversores y los analistas en estos momentos es la del crecimiento económico, sobre el que han surgido numerosas dudas ante la avalancha de medidas de ajuste que están decidiendo numerosos Gobiernos de la UE.

La contratación en el Mercado Continuo, que alcanzó niveles muy altos con el vencimiento de los contratos y futuros efectuado la semana anterior, ha pasado ahora a unas cotas que se consideran "de mantenimiento". En la sesión del lunes, todavía se notó el efecto de los derivados sobre el mercado, con 5.553,70 millones de euros, pero en el resto de las sesiones la media se ha quedado en torno a los 2.500 millones de euros. Las operaciones del "mercado abierto" se han acercado más a la zona de los 2.000 millones de euros, aunque en la jornada del miércoles, cuando el Ibex 35 perdió los 10.000 puntos, se quedó en 1810 millones de euros. -