Medio Ambiente prevé quemar el 47% de la basura en 2020
En el horizonte de 2020, Galicia incinerará un 47% de los residuos urbanos que producirá, lo que supone un aumento del 40% sobre la situación actual. La construcción de una segunda planta de valorización energética en el sur de Galicia, que gestionará una empresa privada por medio de una concesión, permitirá quemar 549.000 toneladas de residuos urbanos actuales frente a las más de 390.000 que incinera la planta de Sogama en Cerceda (A Coruña).
El Plan de Residuos Urbanos de la Xunta, que hoy comienza su periodo de exposición pública con el objetivo de que el Parlamento lo apruebe a finales de año, prevé también elevar el reciclaje de materia orgánica, cartón, vidrio, envases ligeros y otros materiales (como los voluminosos) hasta el 30%. La recuperación que se hace actualmente es del 10,3%. Esto se completa con un objetivo de reducción en la generación de residuos del 10% para 2020. Cinco años antes, en 2015, el plan prevé que toda la basura que se produce en Galicia sea tratada. En la actualidad, van directamente al vertedero el 53,3% de los residuos. Dentro de diez años sólo deberían depositarse un 24%: aquellos que no pueden ser valorizados, como los no combustibles o las cenizas.
Modelo de incineración
El director general de Calidade e Avaliación Ambiental, Justo de Benito, presentó ayer el documento con una defensa clara del modelo de incineración: "Es dar una respuesta eficaz a través de un mecanismo de probada eficiencia y que genera menores problemas". La asociación ecologista Adega cargó contra el plan y apuesta por un modelo de compostaje como el que se lleva a cabo en la planta de Lousame. "Los sistemas alternativos ya cumplen los objetivos de reciclaje" para 2020, afirman los ecologistas. El BNG criticó que se prime la incineración en detrimento del compostaje y que no se haya concretado la ubicación de la nueva planta, que deberá entrar en funcionamiento entre 2014 y 2017. De Benito explicó que, debido a las fases administrativas previas y el tiempo que requiere la construcción, la planta no podría estar lista antes de cuatro años.
Además, Medio Ambiente fomentará a través del plan la agrupación de los ayuntamientos para asumir la gestión de plantas locales y miniplantas de forma mancomunada. Cada municipio de más de 3.000 habitantes deberá contar con un punto limpio.
