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Las cajas plantean un recorte de salarios para reducir las bajas

Cajasur prevé prejubilar a 400 trabajadores y Unicaja dar salida a más de 200

Unicaja y Cajasur ofrecieron ayer a los sindicatos un recorte de salarios para los trabajadores de la entidad cordobesa de siete millones de euros. Este ajuste reduciría el ahorro en personal previsto en Cajasur para fusionarse con Unicaja de los 43,3 millones de euros al año a 36,3 millones. En número de trabajadores afectados, la entidad cordobesa prevé prejubilar a alrededor de 400 mientras que la malagueña prescindiría de más de 200, entre los retirados prematuramente y las bajas incentivadas. La pérdida de trabajadores de ambas cajas rondaría los 700 en total.

Esta propuesta, ofrecida ayer en la mesa laboral, contrasta con la guía para la fusión trazada por la empresa Boston Consulting. La consultora cifraba el ahorro necesario para garantizar la viabilidad de la fusión en 56,7 millones de euros al año (13,4 en Unicaja y 43,3 millones de euros en Cajasur), lo que suponía la pérdida de unos 1.200 empleados, en su mayoría en Cajasur (767).

Las entidades aceptan indemnizar con 45 días por cada año trabajado

Las cajas ofrecieron a los sindicatos una reducción de la edad de jubilación hasta los 53 años. Se espera que el ahorro buscado de 36,3 millones al año se alcance con las prejubilaciones voluntarias de los 420 trabajadores de Cajasur que superan esta edad. Por otro lado, las entidades aceptan otra exigencia sindical: ampliar de 25 a 45 días por año trabajado la propuesta de indemnizaciones para las bajas incentivadas, el máximo legal permitido.

Esta nueva estrategia de ajuste sería compatible con la aplicación de medidas no traumáticas de ahorro por fases. Una vía que ya se avanzó en anteriores reuniones por las cajas. Los sindicatos consultados destacaron que si las medidas "suaves" de ahorro no surten efecto, las cajas siguen contemplando un horizonte de opciones traumáticas. Es decir, un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), a lo que se los sindicatos se oponen frontalmente.

La mesa laboral de ayer fue algo coja. Sólo se sentaron Aspromonte, UGT y Secar. No acudió a ella Comisiones Obreras, el sindicato mayoritario de Unicaja. "Esta convocatoria era una nueva escenificación de los acuerdos entre ambas cúpulas", señaló su portavoz, José Segura. Mientras, los representantes del sindicato Csica sólo acudieron a la mesa laboral para recoger la nueva propuesta de las cajas y luego marcharse.

El sindicato mayoritario de Cajasur, Aspromonte, que ayer convocó una manifestación en Córdoba, criticó la propuesta de las cajas en la mesa laboral. A pesar de reconocer ciertos avances (rebajas de la edad de jubilación y ampliación de los días por año trabajado para cobrar una indemnización) negó que, en conjunto, hubiese ningún cambio significativo. Por lo que siguieron adelante con la movilización. Fuentes de Cajasur criticaron el hecho de que el sindicato, "a pesar de conocer los avances de la propuesta", no se replantease la necesidad de sacar a la gente a la calle.

Vista de la manifestación convocada ayer a su paso por la Ronda Tejares de Córdoba.
Vista de la manifestación convocada ayer a su paso por la Ronda Tejares de Córdoba.F. J. VARGAS

Negociación y manifestación

Con el tiempo corriendo en su contra, las cúpulas de ambas cajas, Unicaja y Cajasur, siguen negociando. Ayer se volvió a reunir al comité de gestión para la fusión, que sienta en la misma mesa a los presidentes de Cajasur (Santiago Gómez Sierra) y de Unicaja (Braulio Medel), además de a los directores generales y a los principales directivos. Fuentes de Cajasur señalaron que se sigue discutiendo sobre cuestiones como la parte que finalmente le corresponderá a la Iglesia, dueña todavía de la caja cordobesa.

Sin ser del todo optimistas, las fuentes señalan que la reunión "no fue mal". La intención, afirman, sigue siendo la de "negociar y negociar", hasta el viernes que viene, momento en que el consejo ordinario de Cajasur tiene de máximo para aprobar la fusión. Con toda probabilidad, los plazos se agotarán hasta el último momento.

Mientras las cúpulas ultiman la negociación, el sindicato mayoritario de Cajasur, Aspromonte hizo ayer algo a lo que no está acostumbrado: una manifestación para forzar el acuerdo laboral. Unas 10.000 personas, según los organizadores, acudieron a la marcha, armados de pitos y pancartas, hasta la puerta de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía. Allí, su presidente, Ignacio Torres, y la plana mayor de Aspromonte criticaron la marcha de la fusión.

El vicesecretario general del PSOE, Rafael Velasco, acusó ayer a PP e IU de intentar boicotear la fusión de Cajasur y Unicaja. "Les gustaría que fracasara, por interés electoral", aseguró Velasco.

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