La ampliación del metro de Sevilla irá bajo tierra salvo en tres tramos

El metro de Sevilla seguirá discurriendo en subterráneo por la capital excepto en tres puntos: la Isla de la Cartuja, el cruce de la SE-30 (que se hará mediante un viaducto) y por detrás del tanatorio de la autovía y el cementerio de San Fernando. La consejera de Obras Públicas y Vivienda, Rosa Aguilar, aseguró ayer que la Junta tiene "clarísimo" que el nuevo trazado será bajo tierra "en toda su extensión" con la única salvedad de estas tres zonas.

La Junta había barajado la posibilidad de que algunos tramos de las nuevas líneas del metro fueran en superficie, una opción que no gustaba a vecinos, comerciantes y el propio gobierno municipal. Aguilar diluyó ayer sus temores: "Cuando hablamos de un metro subterráneo lo hacemos con carácter general y el hecho de que vaya en superficie no afectaría a ninguno de los barrios de referencia ni a puntos como la avenida de la Palmera", afirmó la consejera, que añadió que este planteamiento sólo cambiará si los vecinos acuden a la Junta con "planteamientos diferentes, razonables y consideren que sea necesario".

Aguilar, que compareció ayer con el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, tras la comisión ejecutiva del Plan Estratégico Sevilla 2020, afirmó también que los tramos prioritarios de las líneas 2, 3 y 4 estarán terminados en 2017. La previsión es licitar y adjudicar los primeros tramos en 2011 y abordar las obras de forma "simultánea, pero no a la par". Aguilar adelantó que los tramos empezarán a ponerse en funcionamiento a medida que se vayan acabando, sin esperar a que esté finalizada cada línea.