Cuatro días de payasadas

Verónica González es una titiritera de origen italo-argentino que en lugar de utilizar muñecos de trapo interpreta los personajes de sus historias con los pies. Con su espectáculo Había una vez... dos pies inauguró el jueves en el Lonbo Aretoa el Festival Internacional de Clown de Arrigorriaga. Fue la primera de las 16 obras que configuran la programación de cuatro días que tienen su punto fuerte en los espectáculos de calle. Pero en el festival de Arrigorriaga no sólo se mira; también se aprende a hacer circo en el taller Curso de imbecilidad (la búsqueda del propio clown), que ha ofrecido esta semana el componente de Els Joglars Pep Vila, o se puede jugar con las bolas de equilibrios o los platos chinos bajo una carpa instalada en el polideportivo.

El público infantil podra aprender a realizar números de circo

Una titiritera que interpreta con los pies inauguró el programa

En la calle se podrá contemplar al francés Benjamin A. J. Delmas en el montaje Mr. Bang. Delmas es un payaso al que le gustan las cosas que hacen explosión y se gana al público con una mezcla de comedia, pirotécnia y humo. Los tres componentes de la compañía belga de malabaristas Cirq'ulation Locale, en cambio, juegan con bolos y diábolos al estilo del circo clásico en Just another boyband?, pero con un toque de baile y canciones.

El programa también incluye obras de sala como el cabaret Dudual News, de la compañía andaluza La Butaca Roja, el espectáculo del clown berlinés Gregor Wellny, y las acrobacias del grupo francés franceses Akoreacro, que cerrara mañana el festival con Pffffff.

Los artistas que participan en el festival proceden de cinco países europeos y de Argentina. Entre andaluces, catalanes, madrileños, navarros y aragoneses, están también los grupos vascos Teatro Salitre (On egin mon amour) y Hortzmuga Teatro (Olympicas 2012). Trapu Zaharra, con 25 años de trayectoria en el teatro de calle, presentará en el festival la obra Camping renove, la novedad que incopora esta temporada a su repertorio. Es un espectáculo de una hora de duración que sólo requiere para su montaje una toma de electricidad, 10 vallas y una plaza a la que se pueda acceder en furgoneta.

La plaza Juan XXIII de Arrigorriaga cumple los requisitos y allí desembocará mañana la historia de Camping renove. Sus protagonistas son dos emigrantes uruguayos que tratan de buscarse la vida montando un cámping en el que los clientes encuentren actividades para dejar la mente en blanco. "Pensar es fácil, lo difícil es no pensar" es el lema del negocio. Buscan socios para su singular cámping entre el público y tratarán de convencerles vistiendo trajes regionales e invitándoles a tapas en plena calle.