El futuro de Mundo Ilusión
"Si el Gobierno valenciano no reactiva la sociedad que ha de impulsar el parque temático Mundo Ilusión, Camps y yo tendremos un enfrentamiento personal importante". La frase es del presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, y fue pronunciada seis meses después de que el vicepresidente del Consell, Vicente Rambla, anunciara la decisión del Consell de desactivar la sociedad pública que ha de impulsar el desarrollo del parque de ocio. El motivo fue la ausencia de interés de los empresarios para desarrollar un proyecto de estas características. Pero con la elaboración de los presupuestos de la Generalitat, Fabra exigió que la sociedad fuera dotada para su reactivación inmediata y, finalmente, Camps cedió y la incluyó en las cuentas autonómicas para este año.
Pese a que en un principio la ejecución de Mundo Ilusión, dedicada al mundo de la magia y el circo, debía ser responsabilidad de la Generalitat, la crisis en la construcción y la caída de la rentabilidad de los parques temáticos, según la experiencia de Terra Mítica, llevaron al Consell a descartar su implicación en la construcción.
En cualquier caso, Carlos Fabra no ha cejado en su empeño de sacar adelante el parque y siempre se ha mostrado seguro de tendrá una rentabilidad importante. Para ello, apela a un informe de viabilidad realizado por la empresa Baker Leisure Group, la misma que falló en sus previsiones de visitantes y posibilidades de negocio de Terra Mítica.
El concejal de Urbanismo de Oropesa, Tomás Fabregat, indicó ayer que una vez estén ubicados los 800.000 metros cuadrados que se cederán a la Administración autonómica, tal como exigía ésta, se reclamará a la Generalitat para que "se implique en el parque".
