El fotógrafo Juan del Junco gana el Premio Citoler
"Más que un fotógrafo, yo considero que hago arte contemporáneo usando la fotografía para expresarme". A Juan del Junco (Jerez de la Frontera, 1972) le gusta hacer esta matización antes de hablar con un periodista que se haya dirigido a él como "fotógrafo". Pasear la mirada por sus obras da fe de lo que dice Del Junco. Y es esa vuelta de tuerca que tienen cada una de las obras del jerezano, producto de 10 años de trabajos e investigación, lo que ha llevado al jurado del cuarto Premio Internacional de Fotografía Contemporánea Pilar Citoler 2009 a dar el galardón a este artista de la imagen.
A la cuarta edición del premio han concurrido un total de 152 obras, de las cuales se escogieron 21 en una primera preselección. Posteriormente, se seleccionaron 10. De ellas salió la ganadora. El importe del premio se eleva a 15.000 euros.
"Estoy viviendo un momento muy importante en mi trabajo. He llegado a sentir casi lo mismo que un pintor cuando crea. Me siento honesto con mi trabajo. Me he liberado de tics, de manías", afirma el premiado. Del Junco muestra en sus piezas una serie de constantes que le acompañan. "La memoria personal y el recuerdo autobiográfico me acompañan", prosigue. Y en el mosaico de su vida caben, en un mismo marco, la influencia artística de su madre y la científica de su padre, que es ornitólogo. "Todo se resume en el trabajo que realizo actualmente".
Eso sí, S/T (La Corchuela), la obra que ha sido premiada y que expone Del Junco desde ayer en la Sala Puerta Nueva, pertenece a una fase inmediatamente anterior. "He pasado de ser un joven artista que buscaba influencias a vivir un momento en el que he encontrado un punto personal en el que me encuentro muy a gusto". Todo ello, producto de un proceso de investigación sobre sí mismo, su pasado y lo que le rodea. "A todo lo que hago intento darle una vuelta de tuerca. Algunas de mis imágenes podrían parecer casi fotografías científicas, pero en realidad tienen todo un proceso de elaboración y creación".
De la obra premiada de Del Junco, ha escrito Alfonso de la Torre, jurado y comisario de la exposición: "La historia narrada parece ubicarse en una suerte de tierra de nadie (...). En ese lugar, dos varones parecen detenidos en dicho espacio. (...) Seres varados en un tiempo, sin conversación, sin contacto". En efecto, la obra premiada refleja a dos individuos entre los que se inserta una rama vegetal, que parece arrancada de un árbol que el espectador desconoce puesto que no aparece en la imagen.
La resonancia del Premio Pilar Citoler ya la ha sentido Del Junco. "La semana pasada me di cuenta, en Arco, de que había mucho interés por mi obra. El premio no es sólo importante por el valor económico, sino porque supone una oportunidad de participar en más exposiciones, además de que tu obra salga publicada en un gran catálogo", concluye el artista.
