Los atracadores del chalé de Canals niegan los hechos
El dueño, que mató a dos ladrones, dice que se defendió
Cuatro años ha tardado en llegar a juicio la causa abierta por el asalto al chalé de un yerno del que fuera dueño de Ferry's. Y a punto estuvo de no celebrarse. Pero el tribunal de la sección segunda de la Audiencia de Valencia no aceptó las peticiones de suspensión y cinco horas después de la hora prevista empezó a escuchar a los imputados. Once personas están acusadas por lo que ocurrió el 4 de enero de 2006. Ocho de ellas como autores materiales del robo con violencia. Además, el propio dueño de la casa, Francisco Ramírez, está acusado de la muerte de dos de los atracadores por sus viudas. El fiscal pide para los ladrones penas que van desde un año a casi 21 años. No acusa a Ramírez porque considera que actuó en legítima defensa.
Un imputado pidió la suspensión por tener una bala en el estómago
Cuatro de los imputados declararon ayer. Uno de ellos aseguró al tribunal que acudió al lugar con su coche porque sus compinches le dijeron que iban a cobrar una deuda. Otro reconoció que habían ido a robar, pero que no llevaban armas. Este imputado fue el que provocó uno de los incidentes que puso en riesgo la celebración del juicio. Su abogado pidió la suspensión porque su cliente tiene alojado en el abdomen un proyectil disparado, supuestamente, por el propietario de la casa y considera que es una prueba que debe ser aportada en el juicio. La sala y el fiscal se opusieron por entender que cuando fue detenido explicó que una bala le rozó, pero nunca que la tuviera dentro de su cuerpo. En cualquier caso, el tribunal accedió a que se practiquen las pruebas que se consideren oportunas y que si de ello se desprende cualquier responsabilidad será abierta una pieza separada para ello.
Los otros dos imputados que prestaron ayer declaración reconocieron haber estado allí, pero negaron haber llevado armas y relataron unos hechos distintos de los que recoge el escrito de la acusación pública. Además, pretendieron hacer ver que nada tenían que ver con las armas encontradas en los registros domiciliarios, señalando a otras personas no imputadas. La vista continuará el próximo martes.
El 4 de enero de 2006 una banda de colombianos asaltó el chalé de Francisco Ramírez. Saltaron en muro, amordazaron al guardés y a su hijo, le robaron las llaves de la vivienda principal y entraron en ella. Allí se encontraron con Ramírez y su mujer. Les ataron, registraron la casa y después obligaron a Ramírez a ir a la planta de arriba para que abriera las cajas fuertes. Fue entonces cuando él sacó una pistola y disparó a las tres personas que lo acompañaban en el cuarto. Dos murieron y el tercero es el que ayer dijo tener un proyectil en su cuerpo.
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