"Hay que cambiar muchas cosas"

El congreso extraordinario del PSOE de Andalucía supondrá un antes y un después en todos los ámbitos de la actividad política. Así se deduce de lo dicho ayer por el presidente de la Junta y candidato a la secretaría general del partido, José Antonio Griñán, en una entrevista a Radio Nacional en la que, sin concretar, avanzó que "hay que cambiar muchas cosas" para atraer al votante que, en las encuestas, se muestra "remiso" a apoyar al PSOE.

Griñán aseguró que ha dejado en manos de dos personas de su "confianza", el secretario de Organización, Rafael Velasco, y del secretario del PSOE de Huelva, Mario Jiménez, la preparación del congreso que se celebrará el 12 y 13 de marzo en Sevilla, lo que en el PSOE se interpretó como que ambos estarán en puestos destacados.

La reducción de consejerías se instala en el debate del congreso

La primera indicación que han recibido ya todos los secretarios generales provinciales tanto de Griñán como de Velasco es que el primer objetivo que hay que conseguir es que haya una única lista de delegados en los ocho congresos provinciales extraordinarios. También el vicesecretario federal, José Blanco, se ha reunido con los líderes provinciales, a los que ha trasladado, según contó en Huelva, que el "nuevo ciclo" en el PSOE "está liderado por una cabeza política indiscutible como es Pepe Griñán", informa Lidia Jiménez.

Estos compromisarios formarán el cuerpo electoral que elegirán al nuevo secretario general en sustitución de Manuel Chaves y a la nueva ejecutiva. Hasta después de celebrados esos cónclaves, a partir del 7 de marzo, Griñán no tiene previsto hablar con los dirigentes provinciales de quiénes se incorporarán a la dirección, según fuentes del PSOE.

En este sentido, estas fuentes consideran "una maldad" la filtración de nombres para ocupar determinados puestos, como el de Amparo Rubiales para presidir el PSOE andaluz, ya que consideran que lo que se persigue es quemarlos antes de tiempo. "Lo único que quiero es seguir siendo amiga del presidente de la Junta y que le salga un magnífico congreso", aseguró ayer la consejera de Estado a EL PAÍS.

Con vistas al inicio del nuevo periodo de sesiones en el Parlamento, con un PP crecido por los sondeos, los socialistas quieren que todo el grupo parlamentario empiece a sacar cabeza, aunque muchos son los que están más pendientes del cambio de Manuel Gracia como portavoz, algo que se da por hecho pero tras el congreso extraordinario. "La decisión no me corresponde a mí y mientras tanto a trabajar hasta que el partido decidida otra cosa", dijo Gracia ayer, quien concita mucho afecto en el PSOE, tras mantener una reunión con el consejero de la Presidencia, Antonio Ávila, para mejorar la coordinación. Hoy está prevista la primera reunión del grupo parlamentario tras las largas vacaciones de Navidad.

Aunque Griñán dijo hace dos meses que sólo cambiaría el Gobierno andaluz porque algunos consejeros encabecen las listas municipales -algo que el PSOE decidirá en el mes de julio-, la Administración autonómica es un hervidero de rumores que pronostican la desaparición de varias consejerías -ahora hay 15- en una próxima remodelación de Ejecutivo. En su investidura, Griñán señaló la reforma de la Administración central y periférica de la Junta como uno de sus objetivos, una vez que esté aprobada la ley de Autonomía Local. Esta norma descargará de competencias a la Junta lo que implicará "que haya menos consejerías", aseguró el presidente andaluz a un grupo de periodistas el pasado mes de octubre.