Más cristianos que cristianas

Hathor es la diosa a la que los antiguos egipcios atribuían cualidades protectoras para las mujeres. Tres alcoyanos han desempolvado el nombre de esta divinidad para acuñar y poner en marcha una asociación en defensa de la mujer y, especialmente, de sus constitucionales derechos a participar en igualdad de condiciones con los hombres en las populares fiestas de Moros y Cristianos de la ciudad. Carlos Bernabeu es presidente del colectivo, que arranca con una contundente iniciativa: llegar hasta el Tribunal Constitucional para que anule la marginación de la mujer en los festejos de Moros y Cristianos.

En principio, Carlos Bernabeu ha planteado un recurso contencioso contra el Ayuntamiento de Alcoi y la Asociación de Sant Jordi por no cumplir la ley y promover la igualdad entre mujeres y hombres. El eje central de la denuncia es la última reforma de la ordenanza, promovida por la máxima entidad de la fiesta de Alcoi, que impide que hombres y mujeres puedan compartir ciertas actividades del programa festivo, como la formación de escuadras mixtas en los desfiles oficiales.

La primera demanda del colectivo es los desfiles mixtos

Sólo una 'filà' cuenta con una mujer en su junta directiva

Hathor pone como ejemplo de la discriminación a Nuria Martínez, la primera mujer que logró inscribirse en una filà con los mismos derechos que los hombres, aunque lleva tres años solicitando, sin éxito, desfilar con sus compañeros en una escuadra. En la actualidad, como Nuria, otras cinco mujeres podrían solicitar este derecho frente a los poco más de 3.000 hombres inscritos en estas fiestas, por lo que sus posibilidades de participación se ven limitadas.

Los integrantes de Hathor (además de Carlos Bernabeu, su hermano Andrés y la mujer de éste, María el Mar Hernández) reclaman apoyo económico para llevar este asunto a los tribunales. Calculan que necesitan unos 18.000 euros para financiar su causa y han comenzado una campaña para recaudar fondos.

No es la primera ocasión en que Carlos Bernabeu lleva la exclusión de la mujer en esta fiesta a los tribunales. En su primera denuncia contra la Asociación de Sant Jordi, por una supuesta discriminación de su hija, cosechó una sentencia condenatoria.

La incorporación de la mujer en esta fiesta centenaria es muy lenta. Con todo, 21 de las 28 filaes de la ciudad de Alcoi han aprobado, en los últimos años, diseños femeninos para permitir la entrada de la mujer con el objetivo de que vayan ganando derechos. Sin embargo, su plena participación (acceso a los privilegios de los que disfrutan ellos y desempeño de los principales cargos) es poco visible: Sólo una de las seis festeras inscritas con pleno derecho ha logrado entrar en la junta directiva de una filà con el cargo de contadora.