Vientos de 134 kilómetros por hora

Las rachas de viento más virulenta soplaron ayer a 134 kilómetros por hora tal y como marcaron los anemómetros de las estaciones meteorógicas de Burela y Lousame (en A Coruña). En sólo 24 horas -entre las cinco de la tarde del domingo y el lunes- cayeron sobre esta última localidad 93 litros de lluvia por metro cuadrado. El centro de Santiago marcó otro récord en ese mismo período con 79 litros, según informó Meteogalicia.

El fuerte temporal provocó ayer desprendimientos de piedras y tierras sobre una docena de vías y carreteras secundarias, el más importante en la A-55, ocasionó atascos de cinco kilómetros a la altura de Mos al inutilizar uno de los carriles de la autovía a Portugal. En Vilanova de Arousa, la caída de un muro en la calle Curros Enríquez, provocó, de madrugada, importantes daños a dos vehículos que estaban aparcados.

Durante la jornada de ayer, se registró un siniestro mortal en Vimianzo, donde una joven de 30 años falleció al volcar el turismo en el que viajaba. Su cuerpo tuvo que ser excarcelado por un equipo de bomberos. En Valga los ocupantes de un vehículo que se precipitó por un barranco después de saltar por encima del quitamiedos en la autopista AP-9 lograron salir por su propio pie del coche. Fue un camionero quien alertó al 112 para auxiliar a los heridos.

La Dirección Xeral de Emerxencias decretó a media tarde de ayer la alerta naranja en las localidades costeras por viento y fuerte oleaje que podría superar los cinco metros de altura.