Coren alcanza la cota de los 1.000

Con una facturación superior a los 1.000 millones de euros, Coren es el primer grupo cooperativo que ha entrado en España en el club de los 1.000 con una estrategia basada en cinco pilares: diversificación en la producción; la transformación industrial; apertura de mercados exteriores; innovación y productos saludables, y responsabilidad social con el medio ambiente.

Este conjunto de actuaciones ha supuesto para el grupo cooperativo unas inversiones anuales de unos 30 millones de euros en la última década.

Frente a la crisis que acecha en este momento a una parte muy importante del mundo cooperativo, con problemas de precios, excedentes y, en definitiva, rentas en sectores como vino, cereales o aceite de oliva, el grupo gallego, formado por una veintena de cooperativas de primer grado, 3.000 socios y más de 6.000 familias ligadas a su actividad, constituye un modelo de crecimiento y, además, una pieza clave en el mantenimiento de la actividad económica en el medio rural gallego.

Coren invirtió en los últimos años una media de 30 millones de euros

El grupo ultima su homologación para exportar productos a Estados Unidos

"De acuerdo con nuestros técnicos y cooperativistas, apostamos por producir, pero, sobre todo, por diversificar la oferta, abrir y consolidar mercados. Somos un grupo que, a diferencia de lo que sucede en otros sectores en conflicto, no ofrecemos problemas. Tratamos de evitar o, al menos, paliar las crisis que en algún momento afectan a todos los sectores con una estrategia desde la producción a la comercialización orientada en ofrecer rentabilidad a nuestros ganaderos", señala el consejero delegado del grupo, Manuel Gómez.

Desde la perspectiva de la producción, la cooperativa, con más de medio siglo de existencia, se ha ido adaptando a las circunstancias en función de la demanda de los mercados y de su propio entorno. Frente a unas producciones centradas inicialmente en pollos y huevos, en la actualidad el 45% de la facturación corresponde a la avicultura de carne en su conjunto, pero donde, además de los pollos, hay un aumento en la oferta de patos y pavos hasta un total cercano a las 90.000 toneladas. Los huevos han pasado a suponer solamente el 10% de la facturación, con 13 millones de docenas. El porcino sigue siendo uno de los productos de referencia, con la producción de unas 60.000 toneladas y el 35% de la facturación. Finalmente, en los últimos años el grupo ha puesto en marcha una nueva división de carne de vacuno hasta el sacrificio de unas 20.000 terneras gallegas. Esta producción supone aproximadamente el 35% de la ternera que se comercializa actualmente como gallega.

El aumento de la producción vía diversificación se ha complementado con el desarrollo de procesos de investigación para ofrecer productos diferenciados en pollos y carnes y, sobre todo, en la potenciación de la venta de los productos transformados. En esta estrategia se halla la producción de unas 10.000 toneladas de conservas cárnicas desde Frigolouro y la elaboración de jamón en los secaderos de Huelva de más de un millón de piezas al año. Cerrando el proceso para una parte de la producción, el grupo, a través de Coren Grill, ha impulsado su desarrollo en el segmento de la restauración fundamentalmente en base al pollo y a los platos preparados.

Una parte importante en la actividad del grupo cooperativo es la política comercial y la apertura y desarrollo de los mercados. Hoy, del total de su facturación, aproximadamente el 15% se hace en el exterior, sobre todo en la avicultura y el porcino.

El grupo tiene una importante implantación en los mercados de algunos países comunitarios, donde destaca, en primer lugar, Portugal con la empresa Lourinho Conservas de Carne, que supone prácticamente la continuidad de la empresa en Galicia. Igualmente cuenta con un importante mercado con un fuerte crecimiento en Reino Unido, sobre todo en avicultura, así como en Alemania o Francia.

Siguiendo la ruta de los emigrantes gallegos, la cooperativa cuenta con un importante mercado en el continente americano, con especial presencia en Argentina, donde la crisis no está facilitando las ventas. Hubo proyectos para instalarse en Cuba desde la producción en las granjas hasta la transformación, pero no cuajó la iniciativa. En la misma dirección se sitúa su desembarco hace varios años en Rumania con la compra de una planta industrial, y también con la intención de poner en marcha un proceso de producción en un país con una gran tradición en el sector de porcino cuya actividad ha quedado muy reducida por los problemas en los últimos años. En la actualidad mantiene la planta para elaborar productos transformados, pero no se descarta su venta.

Fuera de esos dos continentes, el grupo Coren cuenta con una presencia reducida en varios países asiáticos como Japón y en China, donde espera lograr un fuerte crecimiento en los próximos años, sobre todo en porcino.

En el continente africano, la cooperativa comercializa algunos de sus productos como pollos y huevos en países del norte, Libia, Argelia o Marruecos. En la actualidad, el proyecto más importante se halla en Angola, donde, además de una delegación comercial, se contempla el desarrollo de una planta industrial que podría ser la primera escala para atacar comercialmente el mercado africano.

De cara al mercado estadounidense, el grupo ultima los trabajos en las instalaciones industriales desde el sacrificio hasta la curación para su homologación de cara a la posibilidad de exportar jamones a ese país.

En política de responsabilidad social y el compromiso del grupo cooperativo con su entorno destaca la puesta en marcha en la localidad orensana de Xinzo de Limia de una planta para la recuperación de los residuos de las granjas por un importe de 30 millones de euros. En el marco de ese compromiso con el entorno se halla el desarrollo de razas de vacuno autóctonas en los montes gallegos, lo que supone, además, una medida contra los incendios forestales, al limpiar las zonas de maleza durante todo el año.