La patronal alavesa advierte que aún están por llegar los ERE más graves

"No hemos tocado fondo. Lo peor está por llegar". Juan Ugarte, secretario la patronal alavesa SEA, presentó ayer los datos del último barómetro sobre la actividad industrial en el territorio con este sombrío pronóstico. Este informe, elaborado por SEA a partir de las respuestas de más de 300 empresas, constata que dos terceras partes presentan caídas en su cartera de pedidos. Ugarte advirtió que "en los próximos meses" concluirán los expedientes de regulación de empleo aprobados "sin que haya un repunte de los pedidos", lo que desembocará en nuevos expedientes "que no podrán tener las mismas condiciones económicas que los actuales, en los que se garantiza ente el 80 y el 90% del sueldo a los afectados", advirtió.

La mayoría de los ERE acordados hasta la fecha son de suspensión de contratos, no de rescisión, recordó el dirigente patronal, que dejó caer que eso podría dejar de ser así en poco tiempo. "Nos espera un final de año y un año que viene complicados", advirtió. Ugarte realizó dos peticiones para el momento en que las empresas y los sindicatos se sienten a pactar estos nuevos expedientes. Primero, que las indemnizaciones de los trabajadores afectados sean moderadas, para no "descapitalizar las empresas" ni "comprometer su futuro". En segundo lugar, solicitó que estas negociaciones se hagan en el marco del diálogo social. Ugarte destacó, en este sentido, los logros conseguidos por la mesa que sienta a CC OO y UGT, Gobierno y patronal en Euskadi en sus primeros 20 días -con acuerdos sobre formación de trabajadores afectados por EREs y seguridad laboral- y abogó porque se recupere el diálogo roto en Madrid.

Todos los indicadores que muestra el barómetro del SEA son malos. Así, un 71,2% de las empresas consultadas ha contestado que su situación actual es de recesión -el peor registro de los últimos años- y el 77% ha facturado menos en el primer semestre de este año que el mismo periodo de hace un año. La facturación en la construcción y en el metal, los dos sectores más importantes de Álava, ha caído un 38% y un 37% respecto a 2008. El sector que mejor se comporta es el vinícola: sólo ha caído un 19%.

Ugarte señaló que, a pesar de todos estos datos negativos, el 50% de las empresas de Álava expresan su intención de mantener o incrementar su plantilla y que el 61% quiere seguir con el mismo nivel de inversión.