Los Patios de Córdoba, candidatos a Patrimonio Inmaterial de la Humanidad

Cada mes de mayo, los patios del casco histórico de Córdoba y de los barrios más tradicionales, como San Basilio o Santa Marina, abren sus puertas para que el público pueda disfrutar de las miles de flores que lucen y decoran sus paredes. Esta tradición, que se convirtió en fiesta organizada en los años 20, ya es candidata a convertirse en Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, gracias a la decisión tomada ayer en Palma de Mallorca por la Comisión de Patrimonio Nacional. La resolución última la tendrá un comité internacional de la Unesco.

Asimismo, el canto medieval La Sibil·la de Mallorca también ha sido seleccionada como una de las cuatro candidaturas que se presentarán para Patrimonio Cultural Inmaterial, junto con el Flamenco y los Castells (torres humanas). Las comunidades de Andalucía, Extremadura y Murcia apoyan conjuntamente la propuesta del Flamenco mientras que los Castells están respaldados por Cataluña, y los Patios Cordobeses, por Andalucía. España también ha decidido sumarse a la candidatura trasnacional de cetrería presentada por los Emiratos Árabes Unidos, a la que ya se han sumado otros Estados.

La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía aprovechó la reunión para proponer a la Comisión de Patrimonio Nacional que el yacimiento arqueológico omeya de Medina Azahara vuelva a estar en la Lista Indicativa de monumentos que son candidatos a convertirse en Patrimonio Mundial. Sólo el Ministerio puede elegir qué se incluye en esa relación final que se remite a la consideración definitiva de la Unesco. Medina Azahara estuvo hasta el año 2002, pero luego fue relegada a una lista secundaria. Cuando hace unas semanas se supo que la antigua ciudad de Abderramán III no se encontraba entre las candidatas de la Lista Indicativa, arreciaron las críticas contra la Junta, que ya anunció en 2005 que presentaría un expediente defendiendo la candidatura del yacimiento. La declaración de intenciones de ayer, por parte de Cultura, es un primer paso dentro de un largo proceso que puede durar dos o tres años. Es necesario que se presente un amplio informe para que sea aceptada la candidatura.