"Forlán es un chico ambicioso"

"Ha sido una noche increíble", dijo Diego Forlán en los pasillos de San Mamés, haciéndose el melindroso, después de haberse convertido en la figura más rotunda del campeonato. "Me fijo más en lo colectivo que en lo individual, aunque en lo individual también estoy contento. Lo importante, de todos modos, ha sido que los goles han servido para sumar los tres puntos y nos ayudan a clasificarnos para la Champions".

Estaba haciendo valoraciones el goleador cuando el técnico del Atlético, Abel Resino, asomó su cabeza irregular, trazada por cicatrices, miró alrededor, como si esperase un remate, y se sentó en la sala de prensa de San Mamés sin exhibir las emociones, si es que estaba emocionado por algo. "Todavía no tenemos nada en el bolsillo", masculló con ese tono grave con el que debe de dirigirse a sus jugadores en el vestuario. "Todavía nos queda rematar, previno; "el fútbol es imprevisible. Es cierto que hemos dado un gran paso, pero ahora hay que rematarlo porque, si no, no serviría de nada. La final de verdad será la próxima jornada".

Con esto, Abel advirtió a su gente de que, a pesar de que el próximo partido es contra el Almería, que ya acabó su temporada, y se juega en el Calderón, no hay que bajar la guardia. Tras su goleada de ayer en Bilbao, el Atlético, el Atlético toca la Champions con la yema de los dedos. Pero su ex portero, amenazado por un contrato que debe renegociar el 1 de junio, prefiere poner mucho cuidado en la última jornada de la Liga. El Villarreal está al acecho. A tan sólo dos puntos.

Abel sólo expresó cierta emoción cuando le mencionaron a Forlán, autor de un triplete para coronar la obra que inició Raúl García con el tanto que abrió el marcador. "Es un chico ambicioso", dijo; "además de trabajar para el equipo, marca la diferencia. Parecía que no estaba participando en el juego y ha hecho dos goles clave y luego otro de penalti".

Forlán no sólo se ha convertido en el impulsor del Atlético esta temporada y el autor de la clasificación virtual del equipo para la Champions. El uruguayo, apodado, como la bruja, Cachabacha, por su nariz ganchuda y sus ojos de mirada exaltada, lleva 11 goles en las últimas siete jornadas. Desde la temporada 1940-41 no surgía un goleador con esta racha. La seguidilla le ha valido superar a Eto'o en la carrera por el Trofeo Pichichi. El camerunés suma 29 tantos. Forlán ya tiene 31. Va camino de ser también bota de oro. En Europa no hay otro delantero más efectivo que él. Para definirlo basta un dato: ha rematado 20 veces menos que Eto'o.

"Eto'o es un gran delantero y puede pasar de todo", opinó Forlán de su contendiente azulgrana. Cuando le preguntaron por su posible fichaje por el Barça, se mostró ambiguo. Igual que los jugadores que están resueltos a cambiar de aires y no lo pueden confesar. "Primero, está la Champions. A ver qué pasa en la última fecha", dijo; "y después me iré a jugar con mi selección".