Herida grave una niña de tres meses al caerle un balcón en el centro de Vigo

Unos operarios tensaban el cable que soportaba el alumbrado navideño, amarrado a un balcón de la sede de Banesto, en el primer piso de la esquina de las calles Príncipe y Velázquez Moreno, en pleno centro de Vigo. La tensión del cable removió la piedra a la que estaba amarrado, lo cual, a su vez, provocó el desprendimiento parcial de la barandilla, toda ella de granito, justo cuando pasaba por debajo un coche de bebé, empujado por su cuidadora. Los cascotes cayeron sobre un lateral del coche, que quedó arruinado entre las piedras y con el bebé dentro.

Los hechos ocurrieron poco antes de mediodía y generaron una gran alarma entre los viandantes que lo presenciaron. La cuidadora, aparte de los rasguños que le ocasionaron las piedras al caer, sufrió una crisis nerviosa. Una pareja de médicos del Hospital Meixoeiro que casualmente pasaban por allí se abrió paso entre los gritos y la agitación del corrillo y pudo realizar un primer examen a la criatura, confirmando que estaba con vida, y a su cuidadora, antes de que llegara la ambulacia que trasladó a ambas al Hospital Xeral. También acudió al lugar la madre del bebé, quien, según testigos presenciales, se quedó "bloqueada" ante lo que estaba ocurriendo.

Domínguez abre una investigación y suspende la colocación de las luces

En el hospital, al bebé, una niña de tres meses, se le apreció traumatismo cráneo-encefálico de pronóstico muy grave. Fue derivada a la unidad de cuidados intensivos e intervenida quirúrgicamente. A su cuidadora, que formaba parte del servicio de canguros que presta la Concellería de Igualdade, le diagnosticaron "crisis nerviosa" y lesiones de carácter leve.

Pero la agitación continuó en el citado cruce de calles, habitualmente muy concurrido por su carácter céntrico y peatonal. Cuando la ambulancia del 061 ya había partido con las víctimas hacia el hospital, llegaron los bomberos y la policía, que acordonaron el lugar, así como el teniente de alcalde, Santiago Domínguez, de quien depende la instalación del alumbrado navideño, y los concejales de Urbanismo, José Mariño, y Gestión Municipal, Carlos López Font.

Domínguez ordenó la inmediata paralización de las labores de instalación del alumbrado navideño en toda la ciudad hasta conocer las causas del accidente, para lo que solicitó al mismo tiempo "un informe exhaustivo" a la empresa encargada de las operaciones. "Hasta que no tengamos claro lo que sucedió, no se colocará ningún elemento más", aseguró. La empresa entregará hoy su informe en el ayuntamiento.

El teniente de alcalde también se desplazó al hospital, donde fue informado por el equipo médico que atendió al bebé y a su cuidadora, y puso a disposición de los padres de la pequeña todos los servicios municipales que pudieran precisar.

El edificio del que se produjo el desprendimiento está en buen estado de conservación, según informaron fuentes municipales tras una primera revisión por parte de los técnicos de Urbanismo. Por su antigüedad le correspondería pasar la Inspección Técnica de Edificios (ITE) en 2013. Las mismas fuentes municipales reconocieron que el programa de la ITE está acumulando alguna demora en el calendario previsto.

Aunque las situaciones de deterioro de fachadas y los desprendimientos más alarmantes han ocurrido en el Casco Vello, hace unos meses también se desprendió una cornisa de un edificio de la misma calle Príncipe, probablemente la más transitada de la ciudad por los peatones, sin consecuencias graves.