Colomer cede puestos para lograr el apoyo del 60% del PSPV de Castellón

Francesc Colomer cedió. En lugar de mantener su apuesta arriesgada, el nuevo secretario provincial del PSPV en Castellón optó por ceder puestos en la ejecutiva provincial para garantizarse el apoyo mayoritario a una lista que finalmente sólo obtuvo el 60,35% de los votos. Colomer había diseñado una propuesta de integración, pero sin concesiones en la inclusión de nombres y hombres marcados y señalados. Una ejecutiva de gente nueva, una ejecutiva para el cambio que pretende el socialismo valenciano. Sin embargo, a última hora rehizo la lista e incluyó en el organigrama una segunda vicesecretaría general para otorgársela a la plataforma municipalista, formada por quienes prestaron su apoyo a Jorge Alarte. Colomer ya había cedido la presidencia a este mismo segmento, con lo que al menos pudo mantenerse en su idea de condicionar, pese a la concesión de un importante porcentaje de representatividad, la inclusión de hombres y mujeres no quemados. Con ello, la ejecutiva, en la que también integró al portavoz del Grupo Socialista del Ayuntamiento de Castellón, Juan María Calles, como secretario de Grandes Ciudades, logró finalmente el apoyo del 60,35% de los delegados presentes en el primer congreso provincial del PSPV de Castellón.

El secretario provincial consigue el respaldo del 83% de los delegados

La candidatura única de Colomer para ocupar la secretaría provincial logró el 83% de los votos, un índice que demostró cómo los representantes de La Plana Baixa se mantuvieron en su intención de querer hacerse notar por no haber sido incluidos en puestos visibles. Así, su decisión los presentó como responsables de que el referente provincial del socialismo en Castellón sea incontestable pero no tenga el apoyo unánime. Y la brecha se hizo mayor a la hora de votar la ejecutiva.

El secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, no respaldó la presión de los contrarios a Colomer, no fue especialmente beligerante en el intento de que fueran incluidos en la ejecutiva, pero tampoco puso empeño en mostrar su capacidad para influir sobre quienes le ayudaron a alcanzar la secretaría general. Y Alarte no consiguió que, como pasó en Valencia, la secretaría provincial alcanzara un porcentaje aún más rotundo y sobrepasara el 90%.

Hicieron falta dos horas más de lo estipulado en el programa para que Colomer presentara una lista para cuya confección, según había dicho Jorge Alarte, tenía las manos libres. A quienes sí logró mantener fue a la diputada autonómica María José Salvador como vicesecretaria primera, y al diputado provincial Francisco Valverde como secretario de Organización.

Minutos antes y después de que Colomer le dijera "quiero ser el pilar de tu éxito en Castellón", Jorge Alarte felicitó al nuevo secretario provincial y lo calificó de "líder" por su honradez y su "visión ética de la vida política". "Un referente indiscutible", añadió, y mostró su confianza en que sea el líder que "dará respuesta a los problemas de esta provincia". El líder de los socialistas valencianos también le aseguró que la dirección del PSPV está "absolutamente implicada" con él. Y, antes de cerrar el congreso, buscó palabras para Ximo Puig, a quien agradeció su "lealtad al partido".

Jorge Alarte fue el único que nombró al presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, para decir que "si hay responsabilidades penales, el responsable político será Camps". Colomer, que hizo continuas referencias a Fabra pero sin nombrarlo, se mostró satisfecho por un congreso en el que no han "blindado ninguna situación de corrupción", en alusión a los cambios estatutarios que aprobó el PP, que "rebajó, de manera inadmisible, el listón de las exigencias éticas y morales a sus miembros".