_
_
_
_
Reportaje:Estilos

Rock en la isla de las anguilas

La londinense Eel Pie Island, cuna de Rolling Stones y Yardbirds, vibra de nuevo con una escena de bandas locales de pop como Mistery Jets o Jamie T

Xavi Sancho

Danny Wallace es un loco. Y no crean que ahora viene la clásica frase explicativa en la que el tal Wallace se manifiesta como un loco genial, o un loco peligroso, o incluso un loco bajito.

Allí tuvo su estudio de grabación Peter Townsend, de The Who
El grupo Mystery Jets ha sido el catalizador de esta última explosión

No, Danny es un cómico inglés que posee una web (www.citizensrequired.com) en la que afirma haber creado una nación independiente en su piso del barrio de Bow, al este de Londres. Wallace -era inevitable- es un loco ambicioso. Así, en 2005, en plena campaña de promoción de su recién nacido Estado, afirmó haber conquistado Eel Pie Island (isla de la Tarta de Anguila), una isla situada en el Támesis, cerca de Twickenham, al oeste de la ciudad. Los 122 habitantes de este mítico lugar, donde empezaron sus carreras los Rolling Stones o los Yardbirds, quedaron bajo su control. Días más tarde, la policía le obligó a devolverle a la reina Isabel II sus posesiones. Todo esto parece una chaladura. Y lo es. Pero tiene un sentido. Las cosas siempre han sido un poco extrañas en Eel Pie.

El Eel Pie Hotel fue uno de los espacios clave para entender la explosión pop de los años sesenta. Clásico lugar destinado al baile de salón durante los años veinte, cuatro décadas después se había convertido en el epicentro de la escena beat londinense. El hotel cerró en 1967 para volver a abrir sus puertas dos años más tarde, con el nombre de Colonel Barefoot's Rock Garden, y acogió conciertos de Black Sabbath o Led Zeppelin. En la misma isla, Pete Townsend, de The Who, montó su estudio de grabación y fundó su editora, la Eel Pie Publishing Limited. Antaño refugio de hippies y excéntricos varios, en la más pura tradición británica, Eel Pie Island cayó en el olvido hasta que hace dos años empezaron a llegar noticias sobre la reactivación de la escena musical de tan peculiar e idiosincrásico pedazo de tierra.

Mystery Jets no es una banda rockera como las demás. Este mes, el grupo edita su segundo largo, 21, producido por uno de los popes de la electrónica actual, Erol Alkan. El disco es un peculiar cruce entre psicodelia británica, pop de FM ochentero, indie sincopado y excentricidad isleña. La banda, precursora de la renacida escena de Eel Pie -organizan conciertos y fiestas en el mítico hotel-, posee una notable peculiaridad en su formación: el padre del cantante es el batería de la banda. "Bueno, si hay padres e hijos que juegan a fútbol juntos, no me parece tan extraño que nosotros estemos juntos en un grupo. Mi padre ya no sale tanto de gira como antes, prefiere quedarse en Eel Pie. El lugar le tira mucho", comenta Blaine.

En sus inicios, Mystery Jets actuó como catalizador de esta extraña escena. Artistas como Larrikin Love, Good Shoes o Jamie T -el que más éxito ha logrado hasta la fecha con su cruce entre The Streets y Pete Doherty- acostumbraban a tocar en el destartalado hotel o en barcos navegando sobre el Támesis con preocupante regularidad. Fiestas en squats (casas ocupadas) y demás dolores de cabeza para la policía local formaron el esqueleto de esta escena a medio camino entre el indie revoltoso, el hippismo No Logo y la quintaesencia de lo inglés. "Fue una época maravillosa", recuerda Blaine. "No teníamos nada, no dependíamos de nada ni nadie. Mi padre era un arquitecto hippie fan del rock progresivo para quien nada era lo suficientemente loco. Nos lo pasamos muy bien con las demás bandas. Ahora, Good Shoes, Jamie y nosotros hemos tenido bastante éxito. Es imposible volver a esa escena cuando ya has salido en Top of the Pops. Ahora, si organizamos algo, lo debemos hacer en secreto". Tras un concierto en el hotel al que se presentaron 600 personas y fue clausurado por la policía, la escena de Eel Pie Island fue oficialmente finiquitada. Extraoficialmente, aún sigue viva. Aunque a Blaine ya no le apetece tanto como antes que le recuerden como el tipo que toca con su padre y viene de una isla hippie. "Ahora quiero que me recuerden como el tipo aquél que se volvió loco y grabó un disco influido por Whitney Houston y Phil Collins".

Un embarcadero a orillas de la isla Eel Pie, en el Támesis.
Un embarcadero a orillas de la isla Eel Pie, en el Támesis.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Xavi Sancho
Forma parte del equipo de El País Semanal. Antes fue redactor jefe de Icon. Cursó Ciencias de la Información en la Universitat Autónoma de Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_