"Pasamos por encima de ellos"

El vestuario rojiblanco está enrabietado porque una vez más, y son ya seis temporadas consecutivas, el Atlético fue incapaz de tumbar al Madrid en el Calderón. Esta vez, los de Aguirre fueron claramente superiores durante todo el partido pero entre el árbitro, las paradas salvadoras de Casillas y el desacierto de sus delanteros, al Atlético se le volvió a escapar la victoria. Pablo Ibáñez, central rojiblanco, resumió ayer en rueda de prensa el sentir general del equipo: "Después del partido se palpaba la tristeza viendo las caras de los compañeros, parecía que hubiéramos perdido. Pasamos por encima de ellos, tuvimos mucha mala suerte. No merecimos ese resultado".

El Atlético que saltó al campo frente al Madrid distó mucho del equipo que durante toda la temporada se ha mostrado errático y dubitativo en su feudo. Adelantó sus líneas, presionó en todo el campo y ahogó a los medios del Madrid. Una superioridad que se reflejó también en el juego por las bandas que desarrollaron tanto Galletti, por la derecha, como Jurado, por la izquierda. Galletti sirvió el balón que Torres convirtió en el primer gol de su carrera frente al Madrid. Y Jurado se mostró vertical e incisivo por su flanco. El ex madridista terminó el partido con una fuerte contusión en su pie derecho, aunque la resonancia magnética que se le practicó en la tarde de ayer descartaba la fractura y se espera que el jugador vuelva a entrenarse en los próximos días.

"Tenemos que mejorar a la hora de definir los partidos. Debimos sentenciar", dice Pablo

Pese al buen juego, los rojiblancos no sentenciaron. Pablo lamentó la falta de acierto de cara al gol, que lastra las aspiraciones del Atlético de acercarse a la cabeza de la Liga: "Tenemos que mejorar en este aspecto. Debimos sentenciar el partido, porque sabíamos que el Madrid es un equipo con mucha calidad. Ellos aprovecharon una de las pocas oportunidades que tuvieron y nos empataron. Pero insisto, fuimos superiores".

Sobre la actuación del colegiado, y en concreto, sobre el gol que Daudén anuló a Perea mal aconsejado por su línea, los jugadores del Atlético fueron prudentes y hasta conciliadores. "Está claro que no estuvo acertado, pero seguro que no era su objetivo fallar. Además, la decisión la tomó uno de sus asistentes y él le tiene que hacer caso. Todos cometemos fallos y hay que creer en los árbitros españoles", concluyó Pablo.