Yo de ti no lo haría, forastero

Las tardes de los sábados han estado unidas a los clásicos westerns durante mucho tiempo. Esta vez se ha acabado ser un simple espectador. Neversoft Entertainment propone a los que se acerquen a Gun interpretar el papel protagonista en un videojuego con disparos, caballos y grandes extensiones de desierto.

El éxito de Grand theft auto (GTA) hizo pensar a los chicos de Neversoft que sería buena idea trasladar el sistema utilizado por Rock Star a un escenario muy diferente: el oeste estadounidense durante el periodo de su colonización, con personajes de la época y situaciones de película.

La principal baza de GTA consistía en ofrecer total libertad de movimientos al jugador; los creadores de Gun también tenían claro que iban a ofrecer lo mismo: libertad para realizar la misión principal o perderse por el escenario buscando misiones secundarias.

El título nos pone en la piel de un cowboy llamado Colton. En el lecho de muerte, el hombre que le ha hecho de padre hasta la fecha le confiesa que no es su verdadero progenitor. A partir de ese momento su obsesión es descubrir sus raíces. Las pistas le conducirán hasta Jenny, una prostituta que le acompañará y le ayudará cuando convenga.

El nivel gráfico es notable; entre otras cosas, se puede cazar todo bicho viviente que pase por delante del revólver de Colt. Muchos tipos de pájaros, búfalos y algún que otro oso podrán servir para afinar la puntería, aunque para los amantes de los animales será mejor dejarlos en paz y que sirvan para ambientar este desierto.

Un cowboy sin caballo es como un jardín si flores; además de servir como medio de transporte, es un excelente sistema de introducirse en la época. Los enfrentamientos entre pistoleros están aderezados con el llamado bullet time o tiempo bala, que retiene la acción para facilitar la puntería del jugador.

Neversoft ha dado a GTA una vuelta de tuerca porque bebe de las fuentes de un éxito sin convertirlo en una pésima recreación. Lo disfrutarán tanto los amantes de las películas de Jonh Wayne como a aquellos a los que les supo a poco la experiencia del juego de Rock Star.