El futuro del programa de Navarro, pendiente de la audiencia de anoche

Televisión Española examinará hoy con lupa las audiencias de la edición de ayer de Ruffus & Navarro para decidir el futuro del programa que presenta Pepe Navarro. Con el comienzo del año, la dirección de la cadena pública ha otorgado a este espacio una última oportunidad.

Los resultados obtenidos a lo largo de esta semana (el programa se emite de martes a jueves) son un elemento clave para determinar la continuidad o el final de Ruffus & Navarro. "En función de los resultados de hoy [por ayer] se tomará una decisión", afirman fuentes de la cadena.

Navarro volvió a la televisión estatal a finales del pasado noviembre con un formato que conjugaba entrevistas, actuaciones musicales, humor y bloques sobre la actualidad informativa, con toques de denuncia social y barnices de sensacionalismo. Con este formato, TVE experimentaba en el terreno del late night (el arranque de la madrugada), en el que Navarro arrasó en Tele 5 con el polémico Esta noche cruzamos el Mississippi. Más tarde probó suerte en Antena 3 con La sonrisa del pelícano, que fue cancelado abruptamente a las pocas semanas de su estreno bajo otro manto de polémica.

En el caso de Televisión Española, el contrato preveía la cancelación del programa si no se alcanzaban determinadas cuotas de audiencia. Fuentes próximas al espacio afirman que esa frontera estaba situada en el 16%, tres puntos menos que la media obtenida por la cadena el pasado diciembre, un mes en el que TVE-1 logró el 19,3% de la cuota de mercado.

Durante las últimas entregas la media de Ruffus & Navarro ha ha oscilado entre el 10% y el 13%. El miércoles pasado atrajo la atención del 12,6% de las personas que sintonizaban la televisión a esa hora, porcentaje que se tradujo en 606.000 espectadores.

En este proyecto, el presentador no ha estado a salvo de la controversia. Navarro fue objeto de severas críticas por parte de los sindicatos de RTVE, que cuestionaron la externalización total de la producción del programa. Así, la renovada relación contractual contemplaba la elaboración del espacio nocturno incluso fuera de las instalaciones de Prado el Rey, sede central de la televisión estatal en Madrid.

Si finalmente TVE decide suprimir de la parrilla Ruffus & Navarro, el espacio pasará a la historia como otro ensayo frustrado para la medianoche, tras los decepcionantes resultados conseguidos la temporada pasada por La azotea, un formato dinámico y plagado de humor presentado por El Gran Wyoming.