Discreto estreno del Liverpool de Rafa Benítez en la 'Premier'
El campeón de Europa, con cuatro españoles, no pasa del empate ante el Middlesbrough
La Liga española ha conquistado la Premier League inglesa, que ayer alzó el telón con el empate del Liverpool de Rafa Benítez ante el Middlesbrough y seis españoles titulares en tres equipos distintos. En The Riverside, el estadio del Middlesbrough, se hablaba ayer español. Allí juega Mendieta, esforzado en la banda del equipo local. Y allí se vio lo impensable, al Liverpool, el campeón de Europa, alineando de inicio a seis ex jugadores del campeonato español. En la portería, Reina, el hombre que debe asegurar los puntos que se escaparon la campaña pasada por los errores de Dudek, el que luego se convirtió en héroe de la final de la Champions. Por delante, Sissoko, ex jugador del Valencia, y Xabi Alonso, el ídolo de Anfield. En las alas, Luis García y Zenden, uno más de los holandeses llegados al Barça de Van Gaal. Y en punta Morientes.
Benítez, sin embargo, juega con ventaja: todo lo que no recuerda a España en su equipo recupera los mejores valores ingleses. Hyypia y Carragher conforman una pareja de centrales rocosa y compenetrada, insuperable por alto y pegadiza en la marca. Finnan y Warnock no desentonan en los laterales. Y Gerrard, el centrocampista de moda, desorganizado en ocasiones, aporta intensidad en el juego y peligrosas llegadas desde la segunda línea. Tanto nombre, sin embargo, sólo dio como resultado un juego embarullado y desmadejado, insuficiente para doblegar al Middlesbrough, un conjunto menor a día de hoy (0-0).
No corrió mejor suerte el Bolton, que sólo logró empatar en su visita al Aston Vila, pese al gol de Iván Campo y a la clase del incisivo Diouf (2-2). Además, el Manchester United se impuso al Everton, rival del Villarreal en la Liga de Campeones (0-2), con tanto de Van Nistelrooy y Rooney. El Chelsea, último ganador de la Premier, inicia hoy la defensa del título visitando al modesto Wigan.
En la Liga alemana, el Bayern de Múnich, campeón del torneo, dio un golpe de autoridad en el campo del Bayer Leverkusen: sin apenas esfuerzo, el Bayern ganó por 2-5, con Makaay, autor de tres goles, como gran estrella.
