_
_
_
_
_
Reportaje:LA CARRERA OLÍMPICA | Nueva York

Nueva York, bajo la sombra del 11-S

La seguridad es el principal problema del proyecto olímpico, que también cuenta con oposición vecinal

Será la mayor transformación que sufra Nueva York en su historia. Es lo que dicen los responsables de la candidatura olímpica NYC2012 para explicar la dimensión de su proyecto. Pero la fuerza de la propuesta neoyorquina está en lo que ya tiene, sus símbolos, su inmensa red de transporte, la diversidad de sus ciudadanos y capacidad de superación tras los atentados suicidas del 11-S. EE UU cuenta además con la experiencia reciente de haber organizado los juegos de verano en Atlanta (1996) y los de invierno en Salt Lake City (2002).

El sueño olímpico de Nueva York nació en 1994, durante un partido del Mundial de fútbol. Dan Doctoroff, fundador de la candidatura NYC2012, asegura una década después que la ciudad está preparada para mostrar su "energía, internacionalismo y espíritu de acogida". "Nueva York refleja todos los días los valores del olimpismo", afirma Doctoroff, a la vez que explica que la aspiración de la ciudad es "realista" y "realizable". Y a partir de esta premisa se construye el proyecto.

En la ubicación de las distintas sedes deportivas se constata la misma filosofía que da vida a la ciudad para poder moverse ordenadamente y con rapidez: todo sube o baja, o se dirige hacia el este o hacia el oeste.

Los centros deportivos aparecen así dispuestos en una cruz, con la Villa Olímpica en el centro de la misma, lo que permite que el 80% de los atletas esté a un máximo de 10 kilómetros o 30 minutos de sus sedes.

INSTALACIONES

La Villa Olímpica tendrá su sede en Queens, en la conocida como Long Island City, frente al emblemático edificio de las Naciones Unidas y a apenas cinco minutos del Midtown de Manhattan. El complejo contará con 4.400 apartamentos para acoger a los 16.000 atletas que participarán en el evento. Tras los Juegos, se alquilarán o venderán, por lo que se espera que se cree una nueva zona residencial. Los deportistas tendrán acceso directo a la línea 7 de metro.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La atracción principal de los Juegos, el estadio olímpico, estará ubicada en el West Side de la isla y contará con 80.000 localidades. Pero su construcción está siendo polémica porque el estadio será la sede de los Jets, el equipo de fútbol americano. Hay una gran oposición a que sea financiado con fondos públicos bajo la excusa de que será una pieza clave de los Juegos.

El coste de construcción se estima en 1.400 millones de dólares, de los que 600 millones son fondos públicos. Hasta tal punto llega el enfrentamiento, que se pide un referéndum.

Los organizadores quieren aprovechar el tirón que tiene la ciudad para apoyar su candidatura. El Madison Square Garden, el estadio más famoso del mundo, acogerá la competición de baloncesto, Central Park albergará la prueba de triatlón y la competición de béisbol tendrá lugar en el mítico estadio de los Yankees.

En el East River, en Brooklyn, con la estampa de la Estatua de la Libertad, se construirá el centro para deportes acuáticos y el parque de Fresh Kills, en Staten Island, acogerá las pruebas de equitación. El Empire State se iluminará durante el evento con las banderas de los países participantes, mientras los anillos olímpicos cubrirán Manhattan.

ALOJAMIENTO

La organización ya cuenta con el acuerdo de más de 200 hoteles que pondrán a disposición 45.000 habitaciones, un tercio de la capacidad hotelera de la ciudad. La red hotelera olímpica concentrará las habitaciones disponibles en un radio de 2,5 kilómetros desde el centro de Manhattan, a las que se suman 13.850 habitaciones más en un radio de 10 kilómetros.

Además, se pondrá en marcha un programa de acogida para que los familiares de los atletas puedan tener alojamiento gratuito en casas de ciudadanos de su mismo origen, aprovechando la diversidad que caracteriza a Nueva York.

SEGURIDAD

Es el punto más delicado del proyecto, a raíz de los ataques suicidas del 11-S. La ciudad movilizará a una tercera parte de su cuerpo de policía, integrado por 36.000 agentes, y se coordinará con las otras agencias para poder unificar las operaciones. Los Juegos serán considerados como un "evento especial" por el Gobierno federal, lo que asegura fondos suficientes para crear una fuerza integrada.

TRANSPORTE

Es la clave de la propuesta neoyorquina, hasta el punto de que los NYC2012 han sido designados como los mass transit games. Su red de transporte público tiene capacidad para movilizar a 10 millones de personas diarias. La idea es que el 90% de los espectadores, empleados y voluntarios los utilice durante el evento deportivo. Su metro es el más grande del mundo, dispone de tres aeropuertos internacionales -JFK, la Guardia y Newark- y dos grandes estaciones de tren en Manhattan -Gran Central y Penn Station.

MEDIO AMBIENTE

La candidatura olímpica de Nueva York está trabajando estrechamente con las agencias de Naciones Unidas para incorporar a su plan "las mejores prácticas" y las "últimas innovaciones" en el campo medioambiental, como el uso de energías limpias en los medios de transporte y la construcción de edificios "ecológicos".

Lo más destacado será la recuperación de las zonas industriales en el conocido como waterfront -rivera- de Brooklyn y Queens, que serán descontaminadas para acoger las nuevas sedes deportivas y jardines.

Además, crearán nuevas área de recreo en diferentes zonas de la ciudad y se dará vida al proyecto para la creación de un gran parque en Staten Island, donde se realizarán las pruebas de ciclismo de montaña. A esto se le suma el hecho de que el 70% de los deportes durante los Juegos se realizará en estadios ya existentes o en proceso de construcción. Y para promocionar a escala mundial los principios de desarrollo sostenible, aprovechando la celebración del evento, se lanzará una serie de iniciativas y premios "verdes" para los equipos y atletas que hagan valer con su ejemplo el respeto al medio ambiente.

El criterio político

El brutal ataque terrorista que sufrió la ciudad el 11 de septiembre de 2001 contra las míticas Torres Gemelas puede jugar a favor de la candidatura neoyorquina, entre otros motivos por la capacidad de superación mostrada por sus ciudadanos, uno de los principios sobre los que se basa el movimiento olímpico. La diversidad y el grado de convivencia de sus gentes son otros símbolos del olimpismo, que favorecen su proyecto al margen de los requisitos técnicos.

Pero hay un elemento negativo que puede ser determinante: el sentimiento antiamericano tras la invasión de Irak y la reelección de George Bush como presidente de EE UU. "Estamos trabajando duro para conseguirlo", afirmó Michael Bloomberg, que este año debe pasar por el referéndum de las urnas para renovar su mandato como alcalde. "Nueva York es la ciudad que, como los Juegos, ensalza el triunfo del espíritu humano", añade Dan Doctoroff, su mano derecha.

La candidatura neoyorquina cuenta con el apoyo del jugador de baloncesto chino Yao Ming, la fondista keniata Tegla Loroupe, la gimnasta rumana Nadia Comaneci o el nadador australiano Ian Thorpe. En total suman 114 representantes olímpicos y paraolímpicos de medio centenar de países, a los que se une el apoyo de 1.650 atletas estadounidenses. "Nueva York tiene el espíritu y la energía que necesitan los deportistas para encontrar el apoyo que tendrían compitiendo en sus respectivos países", afirma Thorpe.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_