La construcción crece en España y Reino Unido, pero retrocede en la mayoría de países de la UE

El dinamismo experimentado en los últimos años por la construcción ha provocado que este sector se haya convertido en el principal motor de crecimiento de la economía española. Este fenómeno es casi exclusivo dentro de la Unión Europea (UE) y choca con lo que ocurre en el resto de la UE. Sólo España y el Reino Unido experimentan estos fuertes crecimientos de producción en el sector de la construcción.

La construcción en España creció un 4%, y en el Reino Unido el ascenso fue del 4,4% el año pasado respecto al anterior, frente a una caída del 0,2% en el conjunto de la UE, según la patronal española de las grandes empresas constructoras, Seopan. Entre los retrocesos destaca el caso de Portugal, con un descenso del 10,9% en la evolución de la construcción.

Y es que en Europa la tendencia al alza de la construcción ha dado un vuelco: se ha pasado de incrementos moderados del 0,2% durante 2002 a un descenso de dos décimas en en 2003. Este cambio se debe a la desaceleración que ha sufrido la construcción de obra civil y el descenso en la edificación.

El retroceso de la edificación en Europa fue de un 0,6% el año pasado, debido sobre todo al descenso en la construcción de viviendas nuevas, que cayeron un 1,6%, mientras que la construcción destinada a rehabilitación y mantenimiento registra un leve incremento del 0,6%. Por su parte, la construcción de obra civil en la UE continúa en valores positivos, con crecimientos del 1,3%. Por el contrario, en el frente liderado por España y Reino Unido se produce un aumento en la edificación del 3,3% y del 5,4%, respectivamente.

Este fenómeno de aceleración del mercado de la construcción ha tenido reacciones en el país anglosajón. El Banco de Inglaterra incrementó la semana pasada los tipos de interés, por quinta vez en nueve meses, un cuarto de punto hasta 4,75%, en parte para intentar moderar la escalada en el sector. España, por su parte, durante 2003 batió el récord de construcción de nuevas viviendas. El año pasado se iniciaron 690.206 viviendas, lo que supone superar por primera vez la barrera de los 600.000 unidades iniciadas. Los expertos consideran como razonable y necesario que la construcción a medio plazo se reduzca a unas 375.000 unidades anuales, según explica el Instituto Nacional de Estadística.

No obstante, se observa en España y Reino Unido una cierta moderación en la producción de la construcción, y una recuperación en el conjunto de la UE impulsado por la construcción de obra civil.