La 'armada' antiincendio
Las autonomías tienen transferidas las competencias en lo que al cuerpo de bomberos y demás técnicos y elementos en la lucha contra los incendios se refiere. Aún así, los medios de combate aéreos están controlados por el Ministerio de Medio Ambiente que pone a disposición de todas las autonomías 53 aeronaves, algunas de gran capacidad, y 10 brigadas especiales, con más de 400 especialistas, que actúan desde 34 bases, para ayudar a capear el temporal de incendios. Existe una coordinación a nivel nacional a través del Comité de Lucha contra los Incendios Forestales (CLIF), que se reúne anualmente en vísperas de la entrada del verano, sobre todo con vistas a los grandes incendios (más de 500 hectáreas afectadas). En estos casos, Protección Civil coordina las peticiones de ayuda. El grueso de las aeronaves no son de propiedad estatal, sino contratadas por un tiempo específico. La flota estatal está compuesta por diez aeronaves anfibias del tipo CL-215T, que cargan 5.500 litros de agua y cuatro aeronaves del tipo CL-215, con capacidad similar. Se contratan a empresas privadas helicópteros, aerotractores, (Airtractor 802), aviones anfibios AT 802 que pueden tomar agua en pantanos y embalses, y avionetas Cessna de supervisión.
