El precio del crudo roza los 35 dólares, el máximo en tres años y medio, por el temor a la escasez en EE UU

El precio del barril de crudo brent (de referencia para Europa) se disparó ayer hasta los 34,80 dólares, el máximo desde octubre de 2000, cuando alcanzó los 35,07. La cotización del petróleo en el mercado de Londres no hizo más que seguir la escalada del barril West Texas en el mercado neoyorquino, que casi superó los 38 dólares, cerca del máximo de 13 años alcanzado hace apenas un mes.

La principal razón de la escalada de los precios fue el dato de las existencias de gasolina en EE UU cuando está a punto de comenzar el periodo de mayor demanda. Ayer, las autoridades energéticas estadounidenses informaron que las existencias habían bajado en la última semana en casi 1,5 millones de barriles, equivalentes a un 5,5% del total.

El desplome de la reservas de gasolinas fue tan alto, tan por encima del esperado, que borró cualquier pensamiento optimista del mercado. La crítica situación de las reservas contribuyó a alimentar el principal temor de los intermediarios: la escasez.

A pesar de que las existencias de crudo sin refinar se habían estado recuperando lentamente en las últimas semanas, la escalada de la violencia en Oriente Próximo y, sobre todo, la cada vez más lejana reactivación del sector petrolero iraquí, reavivaron ayer ese miedo a que el mercado que más crudo importa en el mundo se quede seco cuando más lo necesita. EE UU está ahora en un proceso de recuperación económica, que el encarecimiento del crudo puede llegar a frenar en seco. Hasta la Reserva Federal (banco central) de EE UU ha advertido anteayer sobre el peligro del aumento de los precios de la energía.

Europa, que hasta el momento ha sorteado el impacto del alza del crudo gracias al fortalecimiento del euro, puede encontrarse de un momento a otro en una situación crítica si la moneda única sigue perdiendo fortaleza frente al dólar, como ha estado sucediendo en las últimas semanas.