Carod renuncia a ocupar su escaño en el Congreso y seguirá en el Parlament
La decisión ahorra problemas internos a ERC, pero incomoda al Gobierno tripartito
650.000 catalanes votaron el 14 de marzo las candidaturas de Esquerra Republicana (ERC), pero su principal candidato, Josep Lluís Carod, no llegará a tomar posesión de su escaño en el Congreso. La ejecutiva del partido acordó ayer que Carod se mantenga como presidente del grupo parlamentario en el Parlament con la vista puesta en las elecciones autonómicas de 2007, en las que aspira a llegar a la presidencia. La decisión ahorra problemas a Esquerra porque no exigirá ningún reajuste de la dirección, pero genera incomodidad en el Gobierno tripartito.
"Nuestro mercado es Cataluña y el secretario general del partido y candidato a la presidencia de la Generalitat tiene que hacer política en Cataluña", explicaron fuentes próximas al secretario general de ERC para justificar la decisión. Carod comunicó de inmediato sus intenciones al resto de la dirección, con lo que el debate quedó muy condicionado. Pese a ello, algún dirigente insistió en que la mejor opción sería que Carod se trasladara a Madrid.
El líder de ERC encabezó las listas del 14-M sin tenerlo previsto: fue la fórmula que se encontró para resolver la crisis provocada por su entrevista con ETA, preservando al mismo tiempo el Gobierno tripartito y su liderazgo en Esquerra. El diseño inicial era un viaje de ida y vuelta, pero la imposibilidad de que Carod vuelva a ser conseller en cap y el nuevo escenario abierto con la victoria del PSOE mantuvo la incógnita hasta ayer.
En los últimos días incluso había ido calando en el partido la posibilidad de que su líder afrontara el reto de ir a Madrid, pero finalmente se optó por la idea original: que Carod siga en Cataluña. La decisión es la más cómoda para Carod porque no exige ningún reajuste en la distribución interna de poder en ERC.
A pesar de que el organigrama formal no lo refleja, la práctica ha ido consolidando una bicefalia en la dirección entre Josep Lluís Carod y Joan Puigcercós. El reparto estaba claro: el primero dirigía la política en Cataluña, mientras que Puigcercós asumía el liderazgo en el Congreso.Este esquema se hubiera roto con Carod en Madrid. Fuentes de Esquerra explican que, en contrapartida, el aparato habría exigido acelerar la designación de Puigcercós como número dos, quizá como secretario general adjunto. Ahora los retoques son menos urgentes: Carod sigue en Cataluña y Puigcercós se mantiene como jefe del reforzado grupo en el Congreso, que ha pasado de uno a ocho diputados.
En cambio, la solución adoptada es la más incómoda para el Gobierno tripartito. Tanto socialistas como Iniciativa e incluso sectores de ERC habrían preferido que Carod trasladara su actividad política a Madrid: al tener cerrada la puerta de regreso al Gobierno catalán, temen que tenga prisa para que se celebren cuanto antes elecciones autonómicas y sea un factor de inestabilidad para el Ejecutivo de Maragall.
Esquerra divulgó una nota escueta dando cuenta de la decisión. El objetivo, dice ERC, es que Carod "encabece la preparación del nuevo reto que se plantea ERC en las próximas elecciones en el Parlament, en las que los republicanos quieren superar el millón de votos". La nota añade: "De esta forma, Carod priorizará su acción política en Cataluña, en contacto permanente con el territorio y los agentes sociales, económicos y culturales".
Diputado valenciano
Carod explicará hoy su decisión en Valencia, donde comparecerá junto al presidente regional de ERC, Agustí Cerdà. Éste se convertirá en diputado merced a la renuncia de Carod, ya que iba como número cinco por Barcelona.Puigcercós empezará hoy mismo a trabajar en Madrid: se reúne con Jesús Caldera para explorar las posibilidades de acuerdo entre socialistas y ERC.
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