Una bomba mata a 39 viajeros en el metro de Moscú en plena hora punta
El presidente Putin culpa de la matanza a terroristas chechenos
Una bomba hizo explosión ayer en un vagón del metro de Moscú, el más transitado del mundo, cuando se hallaba repleto de viajeros que acudían a su trabajo en la hora punta de la mañana. Al menos 39 personas perdieron la vida en el atentado y más de 100 fueron hospitalizadas. La explosión se produjo a las 8.30, hora local (dos horas antes en la España peninsular), en el segundo vagón de un tren que viajaba entre dos estaciones del centro de la capital rusa. El presidente Vladímir Putin, que se presenta a la reelección el próximo 14 de marzo, no dudó en culpar de la matanza a terroristas chechenos.
"Escuché horribles gritos en la parte delantera del vagón. Todo alrededor era humo, sólo humo", relató uno de los pasajeros. La explosión destruyó el vagón y esparció los restos de las víctimas sobre los raíles y a lo largo del túnel. "Tuve que abrirme camino pisando restos humanos, carne, sangre... No lo puedo describir. Fue horrible", declaró el viajero superviviente.
Paradójicamente, el hecho de que la explosión ocurriera en la hora punta salvó la vida de muchas personas. Un experto ruso explicó que la onda expansiva se extendió por arriba porque el vagón iba repleto y aseguró que si la distancia entre pasajeros hubiera sido mayor, número de víctimas mortales hubiera sido más alto. Se trata del atentado terrorista más cruento cometido en Moscú desde septiembre de 1999, cuando la voladura de dos bloques de viviendas causó 240 muertos.
En plena ofensiva política para su reelección, Putin señaló con el dedo a los independentistas chechenos y criticó a los partidarios de negociar con el líder independentista Aslán Masjádov para poner fin al conflicto.
El presidente de Rusia recibió mensajes de condolencia y solidaridad procedentes de numerosas capitales del mundo, entre ellos los firmados por el presidente de Estados Unidos, George Bush, y el jefe del Gobierno español, José María Aznar. Pero algunas voces se alzaron para criticar la política de Vladímir Putin frente al terrorismo, entre ellas la de familiares de los muertos en el asalto de las tropas de élite rusas al teatro de Moscú tomado por terroristas chechenos en octubre de 2002. Páginas 2 a 4
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.