España gastó en investigación y desarrollo un 0,96% del PIB en 2001, un 22% menos de lo previsto

El gasto español en investigación y desarrollo representó en 2001 el 0,96% del Producto Interior Bruto, según los datos hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Este porcentaje representa un 22% menos de lo previsto para ese año en el Plan Nacional de Investigación vigente ( el 1,23%) y un 0,02% más que el año anterior. En estas cifras se incluyen los discutidos créditos a empresas para programas de defensa (desarrollo y fabricación de tanques, aviones, fragatas y demás), que ese año representaron el 38% del presupuesto de I+D total. La media de gasto en I+D en los países...

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El gasto español en investigación y desarrollo representó en 2001 el 0,96% del Producto Interior Bruto, según los datos hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Este porcentaje representa un 22% menos de lo previsto para ese año en el Plan Nacional de Investigación vigente ( el 1,23%) y un 0,02% más que el año anterior. En estas cifras se incluyen los discutidos créditos a empresas para programas de defensa (desarrollo y fabricación de tanques, aviones, fragatas y demás), que ese año representaron el 38% del presupuesto de I+D total. La media de gasto en I+D en los países europeos es superior al 1,9%.

Del total del gasto, el sector privado (las empresas) ejecuta el 52% aunque aporta sólo el 47%, incluidos los préstamos o créditos reembolsables. Estos créditos representan un 7,8% del total del gasto en investigación ejecutado por las empresas. El resto de la financiación se divide por su origen en administraciones públicas (un 40%), universidades (un 4%), las instituciones privadas sin fines lucrativos (un 1%) y fondos procedentes del extranjero (un 8%).

Los mayores incrementos en gastos de I+D se han dado en el sector de la enseñanza superior (13,7%) y el sector público (9,3%) mientras que el gasto de las empresas ha aumentado sólo un 6,3%. Estos datos chocan con la previsión del Gobierno de que al final de esta legislatura la I+D empresarial represente el 64,9% del gasto ejecutado.

El diputado del PSOE Jaime Lissavetzky subrayó ayer que las estadísticas ahora conocidas sobre I+D representan una mala noticia y confirman la falta de política científica en España, ya que a pesar de las importantes subvenciones a empresas y el marco fiscal favorable a la I+D el sector privado sigue sin tirar del carro.

En parte, el escaso gasto en I+D refleja el importante porcentaje del presupuesto que se dejó de ejecutar ese año en el Ministerio de Ciencia y Tecnología. Este año se están produciendo igualmente retrasos significativos en la ejecución, entre los que destaca que no se haya firmado todavía, a pocos días del fin del año, el programa Ramón y Cajal de contratación de investigadores.

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