KEN LOACH Y LA BUROCRACIA

Ken Loach, uno de los más destacados directores británicos, ha pedido a los adolescentes que infrinjan la ley y que vayan a ver su nueva película, Sweet sixteen (Dulces dieciséis), clasificada para mayores de 18 años por su lenguaje procaz. Loach dijo que la decisión del Consejo de Clasificación Cinematográfica del Reino Unido no estaba justificada, según informó el diario Daily Telegraph. 'Me pregunto qué mensaje envía el Consejo de Clasificación Cinematográfica a las personas que trabajan en la película al decirles que su trabajo es como el de los actores de películas pornográficas', dijo Loach al diario. El filme, que ganó el premio al mejor guión en la última edición del Festival de Cine de Cannes, cuenta la historia de un joven de un empobrecido suburbio de Glasgow que cae en la delincuencia y en la cultura de las drogas mientras se prepara para la salida de la cárcel de su madre, adicta a la heroína. Un portavoz del consejo dijo que la película contenía un lenguaje fuertemente grosero. Una encuesta realizada entre los cinéfilos muestra que muchas personas aceptan que las palabrotas forman parte de su vida, pero se oponen a escucharlas en las películas, dijo el portavoz al periódico. Loach, cuyas películas retratan vívidamente a la clase baja británica, adquirió fama con la serie de televisión de los años sesenta Cathy come home, que contribuyó al cambio de la legislación de vivienda en Gran Bretaña.