Bravo por la basura
Este título hubiese sido mucho más adecuado al programa que acabo de ver, Bravo por la Amistad, en Canal-Sur Televisión. El título que recomiendo no pretende ser insultante, simplemente, y lo digo sin ironía, es más realista si atendemos al significado de la palabra basura, lo residual, lo que no se puede aprovechar, 'lo repugnante o despreciable', según la Real Academia.
Lo he visto entero con la única intención de poder escribir esta carta sin que se me pudiese acusar de falta de objetividad. Me ha costado terminar de visionarlo, me ha causado angustia y vergüenza, no por las infantiles 'pruebas de amor' a las que se ha sometido a los concursantes, sino por las constantes pruebas fatales del desamor con la sociedad andaluza, con la idea de servicio público y, en definitiva, la prueba fatal del uso pestilente del dinero público. Les aconsejaría, a riesgo de que me acusen de 'intelectualoide' una película: Bambolee, de Spike Lee.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.