El PSOE de Málaga elige hoy en unas primarias entre Bustinduy y Oliva su candidato a la alcaldía

Cuando se proclame el vencedor de las primarias, alrededor de las 21.00 de hoy, el PSOE de Málaga deberá empezar a recuperarse de la tensión que ha vivido en las últimas tres semanas y media. La secretaria provincial, Marisa Bustinduy, ha evitado la confrontación con el portavoz municipal, Francisco Oliva, que ha criticado en varias ocasiones que su adversaria intentara conseguir ventaja de su cargo. En las doce agrupaciones socialistas de la capital se votará entre las 10.00 y las 20.00. Dos anexos recientes han aumentado en unos 30 el censo de 1.631 militantes con derecho a voto.

Oliva, que recogió 459 avales, terminó ayer su campaña de las primarias con dos actos. El primero en la sede de la agrupación de Miraflores, a la que pertenece Bustinduy, y después un acto central en una venta en el inicio de la carretera de Los Montes. Aunque el reglamento de las primarias no establece ningún día de reflexión, Marisa Bustinduy, que sumó 919 firmas, no programó ningún acto para ayer y cerró su campaña el viernes con una intervención en la agrupación del distrito centro y un acto central para militantes de toda la ciudad, en un conocido restaurante.

Once agrupaciones de Málaga, convertidas en colegios electorales abrirán hoy sus puertas a las 10.00 y cerrarán las urnas a las 20.00. Los militantes de otra agrupación, Málaga Oeste, votarán en Carretera de Cádiz sur. La ejecutiva provincial ha nombrado un representante para cada uno de los 11 colegios, en donde habrá además un presidente y dos secretarios elegidos por sorteo y un observador de cada una de las candidaturas.

El escrutinio se hará a partir de las 20.00, aunque la secretaria de Organización, Rosa Torres, apunta que 'si en una agrupación vota el censo completo, se puede hacer el escrutinio antes'. Hacia las 21.00 está previsto que se proclame el resultado final. Oliva votará a las 11.00 de la mañana en su distrito de Carretera de Cádiz Guadalmedina y Bustinduy a las 11.30 en su agrupación de Miraflores Trinidad.

Las tres semanas y media de recogida de firmas y campaña electoral, han terminado con un clima más sereno que en su inicio el 7 de mayo. Entonces, Oliva criticó 'el intento de identificación de la candidatura de Bustinduy con la Junta' y que los seguidores de la secretaria general dispusieran del censo de militantes y los suyos no. El reglamento de las primarias no prevé la entrega del censo de militantes a los aspirantes hasta el momento en que se les proclame candidatos, porque ya hayan conseguido el 20% de las firmas. Sin embargo, el viernes 10 de mayo se entregó una lista a cada uno de los contendientes. La resolución de la presidenta de la comisión de garantías, la catedrática de Derecho Constitucional, María Luisa Balaguer, venía a insinuar que no era muy constitucional hurtar el censo a los aspirantes que necesitan lograr la firma de los militantes.

El último incidente se produjo esta misma semana, cuando Oliva impugnó el cartel de campaña de Bustinduy, en el que aparecía en una foto, junto a unos 40 militantes de Málaga, con José Luis Rodríguez Zapatero y la vicesecretaria regional María del Mar Moreno. La foto fue tomada hace un mes en Granada en la Conferencia política del PSOE. El reglamento de primarias no prevé nada al respecto y la propia Moreno se mostró 'encantada' de aparecer en el cartel, con lo que mostraba su apoyo a la secretaria general de Málaga.

Pelea orgánica

Sobre toda esta campaña ha planeado desde el principio la sombra de una pelea orgánica. Ambas partes han acusado a la otra de querer hacerse con el control del partido en la capital. Bustinduy fue elegida secretaria general con el 73,7% de los votos en diciembre de 2000, al frente de una ejecutiva en la que había una mayoría de mujeres y ningún histórico. Pactó la entrada de algunos dirigentes próximos al secretario general saliente, José Asenjo, pero su apoyo principal vino de las agrupaciones de los pueblos próximas al presidente y vicepresidente de la Diputación, Juan Fraile y Salvador Pendón. El resultado de hoy en Málaga saldará la incógnita sobre el control de la capital, pendiente desde hace año y medio.

Salvador Pendón, secretario de Política Municipal de la ejecutiva regional, declaró ayer a este periódico que no votó a Bono en el congreso en el que Rodríguez Zapatero fue elegido secretario general del PSOE, como afirmaba en una entrevista Francisco Oliva. 'No estuve de delegado en ese congreso', precisó.