Credicoop pide al Consell ayudas para costear la 'integración' en Ruralcaja

Con la misma firmeza que el presidente de Caja Rural Credicoop, José Cantavella, aseguró no haber recibido ningún tipo de presión por parte del Gobierno Valenciano para que la entidad castellonense accediera a firmar el protocolo de fusión, indicó que espera recibir 'ayudas' para que el coste económico de la operación repercuta lo menos posible en las entidades. Cantavella mostró su satisfacción por la decisión adoptada que, en consecuencia, provoca la participación en Ruralcaja de las once cajas independientes con participación en Credicoop. Éstas, una vez se haya realizado la fusión, tendrán 'la puerta abierta', tal como señaló el presidente de Credicoop, a su integración en Ruralcaja como socios directos. Una decisión que habrá de adoptar cada consejo rector y avalar las asambleas generales de cada una de las entidades. En todo momento, los responsables de la financiera castellonense quisieron hablar de integración y no fusión y recalcar que la cercanía con sus clientes seguirá siendo la base de la relación entre ambos. Otra de las cosas que tanto Cantavella como el director general de Caja Rural Credicoop, Conrado Balaguer, quisieron dejar claro es que la puesta en marcha de Ruralcaja no tiene fecha fijada sino que depende de cómo transcurran los trámites necesarios para su correcto funcionamiento. José Cantavella tampoco puso fecha al inicio de las negociaciones, sino que comentó que, dados los múltiples foros en los que las cajas rurales de las tres provincias coinciden habitualmente, se había 'consultado' en varias ocasiones la posibilidad de una fusión, que finalmente se ha adoptado en un proceso que Cantavella cuantificó de 'días'. La entidad que ahora ha quedado más descolgada es Caja Rural Castellón, que abandonó el grupo Credicoop y que, probablemente, encuentre alguna dificultad si desea integrarse en esta nueva gran entidad de cooperativas agrarias valencianas.