_
_
_
_

Pekín acoge el estreno mundial de la última obra de Comediants

Jacinto Antón

Miles de libélulas revoloteaban ayer sobre la plaza de Tiananmen como chispas de la alegría expresada una semana antes por los habitantes de Pekín al conocer la designación de su ciudad para los Juegos Olímpicos de 2008. En esta gran capital, en la que los edificios de monumentalidad comunista comienzan a ser tan arqueológicos como los palacios de la dinastía manchú y las grúas de la construcción alzan sus cuellos de acero como orgullosos dragones, han desembarcado con celestial don de la oportunidad Comediants.

El grupo catalán, que fue responsable de la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992, estrena mañana en el Century Theatre su nuevo espectáculo, titulado Bi, en el que se mezclan actores de la compañía con los acróbatas de una troupe china para explicar una historia de contacto de dos culturas, con romance incluido. En Bi, que tendrá su estreno español en el festival de Peralada (23 de agosto), un grupo de payasos occidentales viaja a la China actual: inicialmente, se produce un choque con los valores y la estética orientales, representados por los acróbatas chinos, pero luego se tienden puentes mediante el sustrato mítico común que conducen al mestizaje.

Expectación

El estreno de mañana ha creado expectación: el director Joan Font ha sido entrevistado por diarios y televisiones, que se han interesado mucho por su experiencia olímpica. El propio Font dejó caer ayer que Comediants están abiertos a cualquier propuesta. El espectáculo, publicitado como 'un muy innovador show de comedia musical occidental y acrobacia china', se estrena en Pekín gracias a la poderosa China Performing Arts Agency, fundada en 1957 bajo la supervisión del Ministerio de Cultura chino.

Ayer, en la multitudinaria rueda de prensa de presentación del espectáculo, Font, hombre apasionado, trató de estar comedido y es cierto que no pronunció la frase 'es muy mágico', una de sus favoritas. Pero, ante la pregunta de una reportera china de si había encontrado cambiado Pekín desde su última visita, respondió: 'Me confirma que la ciudad es un caos'. Perpleja, la traductora preguntó qué era un caos. Y Font, quizá evocando la sentencia de Confucio 'las palabras ingeniosas trastornan la virtud', rectificó: 'Una ciudad de contrastes grandes, casas altas con bajas, calles estrechas y anchas'.

Los chinos parecen especialmente interesados en la historia de amor entre una bailarina payasa y un acróbata, central en el espectáculo. Font desveló ayer que esa historia se ha producido ya en la compañía, pues una música del grupo catalán y uno de los artistas chinos se han enamorado. El director recalcó que la visión de China que ofrecen, aunque a través de artistas de ambas culturas, se ha hecho desde Occidente. Y lanzó: 'Sería fantástico que en 2008 se hiciera al revés, que China nos invitara para hacer un espectáculo desde el otro lado'.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Jacinto Antón
Redactor de Cultura, colabora con la Cadena Ser y es autor de dos libros que reúnen sus crónicas. Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona y en Interpretación por el Institut del Teatre, trabajó en el Teatre Lliure. Primer Premio Nacional de Periodismo Cultural, protagonizó la serie de documentales de TVE 'El reportero de la historia'.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_