Aplazado el juicio por lesiones en las protestas del vial de Cabanes

El juicio por las presuntas lesiones ocasionadas a dos miembros de la Coordinadora dels Pobles durante las movilizaciones para impedir la construcción de la carretera Cabanes-Oropesa fue de nuevo aplazado ayer por tercera vez consecutiva. El juzgado del caso decidió suspender la vista ante la incomparecencia de la UTE Cabanes-Oropesa, empresa que subcontrató a los trabajadores que, presumiblemente, agredieron a los manifestantes.

La nueva fecha se ha fijado para el 23 de julio, con lo que el juicio se celebrará más de un año después de los hechos. Carles Mulet, miembro de la Coordinadora, explica que la denuncia se refiere a las 'quemaduras de segundo grado' que sufrieron en los brazos al intentar paralizar el reinicio de las obras de la carretera. 'Nos subimos a una de las máquinas excavadoras y su conductor nos trasladó a lo largo de dos kilómetros por la N-340'. Este trabajador, a su vez, denunció a los miembros de la Coordinadora dels Pobles por una falta de coacciones, hecho que, según la Coordinadora ha sido archivado en el Juzgado de Instrucción número 9. La construcción de esta carretera está paralizada en un tramo de seis kilómetros, al entender el juez que el proyecto de ejecución podría ser constitutivo de un delito ecológico.