El Madrid prepara el alirón

Chamartín prepara un alirón que parece anticiparse con la naturalidad con la que se espera el verano. Los jugadores del Real Madrid salieron ayer relajados del último entrenamiento antes de enfrentarse hoy (21.30, televisiones autonómicas y La 2) al Alavés, al que deberán vencer para proclamarse ya, haga lo que haga el Deportivo, campeones de la Liga. Algunos, como Figo, se apoyaron contra sus coches, al sol del mediodía, para hablar. Otros, como Makelele, disertaron sobre el éxito del equipo esta temporada. 'La Liga y una semifinal de la Copa de Europa es un buen balance', aseguró el francés al tiempo que pinchaba un disco de los raperos Doggy Dog en el equipo de su coche.

Sólo los más comedidos prefirieron callarse ante los micrófonos la euforia que llevan dentro y los planes que barruntan para la celebración del título. Éste fue el caso de Roberto Carlos. El lateral brasileño vive un momento culminante en su carrera: está a un paso de ganar su segunda Liga con el Madrid y, además, como uno de los capitanes del equipo. 'Prefiero guardar dentro de mí lo que estoy sintiendo', dijo en su faceta de jugador responsable; 'no puedo entrar en la euforia de la gente. Primero, tenemos 90 minutos. Si ahora hablase de la fiesta, de que ganaremos y de que está todo preparado para la celebración, sería terrible que luego empatáramos o perdiésemos'.

Para el técnico, Vicente del Bosque, la Liga es el premio más valioso a su trabajo. Es el primer título que el Madrid consigue íntegramente bajo su dirección y un hito que espera con ansiedad reprimida. 'No sé si iré a la cena [de celebración], no he pensado en eso', comentó ayer con aire distraído. 'Yo no participo de toda esta feria que se monta', agregó; 'soy muy práctico y todo ese montaje de celebraciones, de si hay que ir con corbata o sin ella, me da igual. De lo único que se trata es de demostrar que somos los mejores a lo largo de una competición tan exigente como la Liga'.

Peligros del Alavés

El último acto de esa demostración de la que habla Del Bosque llega contra un equipo que hace esfuerzos por reponerse de su derrota en la final de la Copa de la UEFA. Un Alavés más peligroso de lo que aparenta puede presentarse en el Bernabéu, donde ganó por 0-1 el curso pasado. Tras caer contra el Barcelona la semana pasada, el equipo de Mané debe ganar este encuentro para seguir aspirando a competir en Europa el año que viene. 'El Alavés ha tenido una semana para pensar en el partido de mañana [por hoy] y quiere ganar', comentó Roberto Carlos; 'así que vamos a tener que sufrir muchísimo para imponernos, ya que es un conjunto muy incómodo y peligroso'.

El brasileño se unió a Del Bosque para templar los ánimos del público y declaró que no hay que cantar victoria para no humillar al rival y estimularlo hacia el revanchismo. Asimismo, advirtió: 'Creo que podemos ser campeones. Lo que ocurre es que hay ciertas declaraciones que pueden motivar al equipo contrario'. Y el técnico le secundó al punto: 'Con toda esta parafernalia lo único que se está consiguiendo es motivar más al contrincante, que se va a hacer más fuerte debido al desprecio que se le está demostrando'.

La feria de la que habla Del Bosque está totalmente planificada por el club y el Ayuntamiento capitalino. Se trata de un viaje del equipo, del Bernabéu a la Cibeles y de la Cibeles al Bernabéu, para cenar luego en un rastaurante cercano a la plaza de Castilla. La fuente de la Cibeles será vallada antes del encuentro y dejará de expulsar agua. El redondel permanecerá seco para facilitar el acceso de la plantilla al monumento. El recorrido se prevé en un autobús descapotado. Se espera que cerca de medio millón de personas se agolpen en torno a la plaza a la hora de la llegada de los jugadores, en torno a la medianoche. Unos 1.200 miembros de los cuerpos de seguridad y del Samur se apostarán a lo largo del recorrido.

Roberto Carlos, que ayer estaba en plan capitán, anunció que la actitud frente al Alavés será la que se tiene ante una final. 'Es la final por el título', dijo; 'llevamos muchos títulos perdidos, mucho sufrimiento, muchos viajes y muchas concentraciones lejos de la familia. Así que lo de mañana [por hoy] es una final. Podríamos haber definido la Liga, pero esas dos semanas de partidos contra el Bayern Múnich nos perjudicaron porque estábamos más pendientes de la Liga de Campeones'.

Todos los jugadores disponibles -una lista de 18, de la que se cae Morientes- han sido llamados por Del Bosque para concentrarse. Guti, con un esguince, y Karanka, con una microrrotura, se entrenaron ayer con normalidad en un último esfuerzo por unirse a lo que el presidente del club, Florentino Pérez, ha definido como 'momento histórico' para el Madrid.

Real Madrid: César; Salgado, Hierro, Karanka, Roberto Carlos; Figo, Makelele, Helguera, McManaman; Raúl y Savio.

Alavés: Herrera; Geli, Eggen, Téllez, Begoña; Tomic, Desio; Astudillo, Jordi, Pablo; y Javi Moreno.