'He vivido todas las emociones que puedan imaginarse'

Manuel Estiarte ha participado en seis Juegos Olímpicos, proclamándose máximo goleador en tres de ellos. Estiarte fue elegido en los Juegos Olímpicos de Sydney uno de los cuatro deportistas que se integrarían en el Comité Olímpico Internacional (COI). Estiarte estuvo ecientemente en Cádiz en el Campeonato de España infantil.

Pregunta. ¿Qué se siente rodeado de niños?

Respuesta. Sobre todo, ganas de volver a jugar. Me he tomado muy bien la retirada, pero la ilusión de ver tantísimos niños me hace sentir añoranza. En estos momentos me encantaría lanzarme al agua y participar del campeonato, pero entiendo que asumo otras responsabilidades y lo importante ahora es apoyar al waterpolo de la mejor de las maneras.

P. ¿Habrá alguien capaz de batir sus récords?

R. De niño jamás pensé que podía conseguir tanto a título personal. Pero lo realmente importante es que tratándose de un deporte pequeño y con tantísimos problemas, haya sido el que más éxitos ha otorgado al deporte español en todo el siglo. Al margen de las medallas conseguidas, no olvidemos que estuvimos presentes en todas las finales continentales de la última década. Y esto es un éxito del trabajo en equipo. Además, nos hemos divertido mucho y demostrado que con cortos presupuestos se puede hacer grandes cosas.

P. ¿Su mejor logro?

R. Sin duda participar en los Juegos Olímpicos, donde, además, hemos vivido todas las emociones que puedan imaginarse. Hemos hecho realidad la ilusión del joven que se realiza y participa en los Juegos sin importarle para nada el resultado. También la del equipo potente que pierde la gran final en casa, Barcelona, ante 15.000 aficionados y donde el sentir general es que el mundo se rompe por la mitad. Y, por último, lo que supone para todo el bloque ganar la medalla de Atlanta. Ahí tocamos el cielo en toda la extensión de la palabra.

P. ¿Cómo se presenta el futuro del waterpolo en España?

R. Hay que trabajar muchísimo. El waterpolo español tiene muchos problemas y sería un error fijarnos en la selección española. Basémonos en que este deporte tiene muchas carencias territoriales, de estructuras y que está empezando a funcionar.

P. ¿Le enorgullece que los jóvenes le tengan como ejemplo a seguir?

R. El simple hecho de firmar autógrafos me ruboriza. Evidentemente me enorgullece que se fijen en mí como deportista. Si yo, con 12 ó 13 años, hubiese podido viajar desde Manresa a Cádiz para practicar deporte, me hubiera sentido un privilegiado. Hoy en día se dispone de mejores y más instalaciones, y estoy convencido de que en pocos años habrá quien lo haga mejor que Manuel Estiarte.