"Hay buenos jugadores a bajo precio"

Temperamental, inquieto, orgulloso de su originaria condición de proletario, Steve Archibald (Glasgow, 1956), propietario, director general y entrenador del Airdire, se encaja el gorro de lana a pie de campo: "Así, con gorro, me veo como lo que soy, un trabajador". Es millonario pero el destino le reserva el riesgo y la angustia propios de un muchacho educado en el manejo de las herramientas en el cinturón industrial más grande de Escocia. Bota de oro en el Aberdeen que le ganó la Recopa al Madrid en 1983, fichaje estrella del Barcelona en 1984 -adonde llegó para cubrir el vacío dejado por Maradona-, máximo goleador del equipo catalán hasta 1987, delantero del Blackburn Rovers y, finalmente, del Espanyol, en Segunda. La vida de Archibald como futbolista está plagada de agitación y movilidad. De discusiones inexorables con todos sus técnicos. Y de goles. Unos tantos que marcaba no por poseer una agilidad especial, sino gracias a la misma inquietud que lo revolvía en la vida.Pregunta. ¿No le habría resultado más cómodo quedarse jugando al golf en Andalucía?

Respuesta. No, no podría dedicarme a jugar al golf porque yo siempre quise trabajar. Y esto que hago, invertir en un equipo de fútbol, es una consecuencia lógica de mi carrera deportiva. No me podría quedar quieto. Soy ambicioso y me gusta el riesgo.

P. He leído que trabajó para Rolls Roice.

R. De joven fui mecánico en la fábrica de la Rolls Royce, en Glasgow, y de mayor cumplí mi sueño y me compré un Rolls. Pero sólo me duró seis meses. Atraía demasiado la atención y no me entraba en el garaje. Parece que la vida tiene esas paradojas... Además, si ahora viera que uno de mis jugadores aparece con un Rolls pensaría que le estoy pagando demasiado.

P. ¿Está en crisis el fútbol escocés?

R. Sí. Seguro. El desarrollo de los jóvenes deja mucho que desear y la culpa es de la federación y de los entrenadores. En primer lugar, la competición de 12 equipos no da opción a términos medios: o se lucha por el título o por no descender. Y siempre necesitas jugadores con experiencia para sobrevivir, con lo cual, los jóvenes se desaprovechan. Hay talentos, pero se pierden en una carrera en la que sólo dos equipos tienen posibilidades de ganar la Liga: el Celtic o el Rangers. Así que yo creo que deberían aumentar la Liga a 16 equipos.

P. Esto que ha organizado parece una escuela de fútbol.

R. He traído jugadores de España porque ahí se juega el fútbol que la gente quiere ver, el fútbol ganador, elaborado. Estos futbolistas van a educar a los chavales escoceses del Airdrie. Porque yo puedo llegar y decir cómo hay que jugar, pero no es lo mismo. Ahora los chicos van a ver cómo se hacen las cosas en los entrenamientos, aprendiendo de sus propios compañeros.

P. ¿Y los resultados? De nueve partidos, sólo han ganado dos.

R. Los fans prefieren ver buen fútbol antes que ganar. Y nosotros jugamos muy bien, sólo nos hace falta el toque asesino: alguien que concrete las situaciones de gol que se generan. Un rematador de área de penalti. Les digo a los jugadores que aunque perdamos no importa, que en tres meses hemos logrado hacer el mejor fútbol de Escocia.

P. ¿Cómo seleccionó a los jugadores?

R. No es difícil, con mi experiencia, seleccionar buenos jugadores. Yo he sido jugador, y sé lo que necesito. Soy la única persona en el mundo que reúne toda esa experiencia al mando de un club. Otros presidentes importan pescado. Yo soy jugador: desde mi perspectiva hay un océano de buenos futbolistas de buena calidad a bajo precio.