Somarriba se viste de líder en el Tourmalet

Camino de convertirse en la ciclista española más grande de la historia, alter ego femenino de Induráin, Joane Somarriba sorprende principalmente por su enorme humanidad, que hace de la deportista una campeona entrañable. La vizcaína se vistió ayer, en la cima del Tourmalet, el jersey oro que distingue a la patrona del Tour apenas un mes después de conquistar su segundo Giro consecutivo.Su éxito se debe más a su estado de forma que a su voluntad: poco antes de hacer las maletas, Somarriba revelaba su cansancio anímico, trataba de desintoxicarse del estrés sufrido para imponerse en Italia y se declaraba dispuesta a borrarse en favor de su compañera de equipo Edita Pucinskaite, jefa de filas del Alfa Lum en la ronda francesa. Profesional hasta la médula, Somarriba conoció un homenaje en Plentzia, fue recibida por el lehendakari y cortó con su actividad social para refugiarse en Navacerrada. Sin demasiadas ganas, eso sí. Lo suyo, decía, era cumplir el expediente. La carretera la ha puesto en su sitio.

Camino de la cima del Tourmalet, final de la séptima etapa, entre la niebla y la lluvia, Somarriba exhibió al tiempo su condición y su carácter, su sentido del compañerismo. Muy pronto, las rampas de la mítica ascensión pirenaica adelgazaron al pelotón, desperdigado tras Somarriba y Pucinskaite. Trabajadora y jefa de filas, papel que deberá invertirse desde ya, Somarriba tiró de su compañera de equipo sin obtener relevos: la lituana se descolgaba, la vizcaína la esperaba y la animaba sin preocuparse por amasar segundos preciosos para la general. En mitad de una rampa, Somarriba se giró y le confió en italiano que ella realizaría la ascensión para regalarle la victoria. Cumplió su palabra y le devolvió el gesto que la lituana tuvo con ella en la cuarta etapa, cuando ambas llegaron fugadas y Pucinskaite le cedió el triunfo.

Separadas por 24 segundos en la general, ambas deberán discutir entre sí quién de las dos llevará el próximo domingo, el maillot oro en París. Un dilema para Somarriba, más fuerte y completa que su compañera, actual campeona del mundo. La ciclista vizcaína podría imitar a la italiana Maria Canins, en su día autora de un doblete Giro-Tour. A poco que la ambición la sacuda...

Clasificación de la 7ª etapa:

1º Edita Pucinskaite (LIT) 2. 52.12; 2º Joane Somarriba (ESP) m.t.; 3º Severine Desbouys (FRA) a 1.04; 4º Valentina Polkhanova (RUS) a 1.21; 5º Fabiana Luperini (ITA) a 3.15.

Clasificación general:

1º Joane Somarriba (ESP) 21.50.55; 2º Edita Pucinskaite (LIT) a 24; 3º Severine Desbouys (FRA) a 2.33; 4º Jolanta Polikeviciute (LIT) a 2.50; 5. Valentina Polkhanova (RUS) a 2.53; 6. Fany Lecourtois (FRA) a 3.20.