La lluvia perturba a los españoles

Mejor olvidar el Gran Premio de Gran Bretaña cuanto antes. Las estrellas españolas de 500cc brillaron poco en el gris circuito de Donington Park, en el que la lluvia originó que Àlex Crivillé (Honda) y Carlos Checa (Yamaha) tuvieran un mal día: fueron 7º y 11º respectivamente. Ninguno de ellos llegó a protagonizar una carrera con desenlace sorprendente pero no inesperado: ayer llegó el primer triunfo del joven Valentino Rossi (Honda) en la categoría reina. Tras él, se clasificó Kenny Roberts (Suzuki), que consolida su liderato en el Mundial."No lo ha hecho mal el niño". Se lo dijo Mick Doohan, director del equipo de Rossi, a Graziano, el padre del niño. La afirmación no era gratuita. En su novena carrera en 500cc, el italiano de 21 años consiguió su primer triunfo en la cilindrada. Tras acumular ya los títulos de 125cc y 250cc en su corto historial, el bambino de oro está llamado a ser la gran estrella del Mundial de motos en los próximos años.

La alegría de Rossi era compartida por Roberts y por el ídolo local Jeremy McWilliams (Aprilia). Los tres lucharon por la victoria hasta la última curva. Fueron los que mejor se adaptaron a las difíciles condiciones de una carrera que comenzó con el suelo mojado pero sin lluvia, que aguantó algunas gotas al principio y que acabó con el asfalto prácticamente seco. La elección de neumáticos volvió a ser determinante, como casi cada domingo este año. Los españoles, por el contrario, vivieron un día tan negro como el cielo que se extendió sobre Donington. No acertaron con la estrategia de las gomas y se perdieron en el fondo de la clasificación. Las aspiraciones de título de Crivillé y Checa sufrieron ayer un duro revés. "La carrera ha sido una lotería", explicó el actual campeón del mundo, que ahora se encuentra sexto en el Mundial a 57 puntos de Roberts. "No he salido muy bien", agregó el piloto de Seva. "La pista no estaba en buenas condiciones y Rossi ha caído delante de mí, por lo que preferí no arriesgarme. Luego la pista se fue secando y al aumentar el ritmo el neumático trasero se degradó, creo que por una elección inadecuada de los reglajes". Y concluyó: "Dada la situación, opté por sumar el mayor número de puntos posible. No recuerdo una temporada tan extraña en mucho tiempo". Su compañero Sete Gibernau, mientras, fue octavo.

"Ha sido un fin de semana para olvidar. Nada fue bien", comentó Checa, que vuelve a perder de vista al estadounidense en la general, pues queda a 29 puntos. Para él, el circuito de Donington, en el que sufrió un grave accidente hace dos años, sigue siendo maldito. En la próxima cita, en Sachsenring (Alemania), el día 23, tendrá que intentar recuperar su candidatura.

La carrera de 250cc también tuvo a la lluvia como protagonista, aunque el agua acabó compartiendo cartel con el vencedor, el alemán Ralf Waldmann (Aprilia), que ofreció una lección de estrategia y de fortuna. Fue de los pocos que montaron neumáticos de lluvia en lugar de los intermedios -sólo un poco rayados- que aconsejaba el estado de la pista al comenzar la prueba. Pero faltando ocho vueltas se puso a llover con fuerza y Waldmann acabó remontando, recuperando 12 segundos por vuelta a los líderes, hasta adelantar en la última curva al francés Olivier Jacque (Yamaha), segundo ayer y líder de la categoría. El ejemplo de Waldmann fue seguido por los jóvenes Álex Debón (Aprilia) y David Checa (Honda): sexto y noveno respectivamente.