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Edwards huye de su triple fracaso

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Jonathan Edwards se dio un pequeño susto en la eliminatoria ayer de triple salto, pero el plusmarquista mundial y gran favorito de la prueba resolvió en el segundo intento su fallo en el primero. Podrá así aspirar mañana a sacarse la espina de sus derrotas en Atlanta 96 y en Atenas 97. Sólo se desquitó algo con la victoria en los Europeos de Budapest, en 1998. El británico se desequilibró en el tercer salto y lo peor es que pareció que se lesionaba, algo a lo que ya está acostumbrado últimamente. Pero no fue así, y se quedó en 16,70, a 30 centímetros de la marca mínima de clasificación para la final, 17 metros. Menos mal que en el segundo, donde apenas cogió tabla tampoco, coordinó bien y eso para él es suficiente. Se fue a 17,28 y pudo descansar tranquilo.

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