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Bancaixa pide más del 14% de Aguas para cerrar un acuerdo con su socio francés Bouygues

Mientras unos socios de Aguas de Valencia (AVSA) aseguran que las negociaciones para cerrar la guerra accionarial en la sociedad están "avanzadas", otros las dan por cerradas. Los valedores del acuerdo explican que AVSA absorberá Vainmosa Cartera, cuyos socios son Bancaixa, BCH, Lubasa y Facsa. Con esta operación, Egevasa, empresa de aguas de la Diputación de Valencia, pasaría a pertenecer al grupo AVSA a cambio de acciones. Así, Bancaixa pasaría del 5% al 15% en AVSA y Lubasa y Facsa entrarían con un 4%. Un portavoz de la caja tildó ayer el paquete de insuficiente.

Fuentes cercanas a Bouygues, socio de Aguas de Valencia a través de su filial española Saur -posee un 33% de AVSA-, confían en que la paz con el resto de socios se cierre antes de la junta de accionistas de la sociedad, prevista para la última semana de junio. Bouygues está enfrentada a Bancaixa -a través del Banco de Valencia, que tiene un 5% del capital- y al ahora BSCH -con otro 20%- desde finales de julio de 1998, en que la estabilidad de la sociedad hídrica saltó en pedazos. Casi un año después y tras la incorporación de un cuarto accionista, el naviero valenciano Vicente Boluda, que entró con cerca de un 13% en AVSA, una parte de los accionistas ven próximo el acuerdo definitivo. Concretamente, Aguas de Valencia absorbería Vainmosa Cartera,una sociedad utilizada por Bancaixa, el todavía BCH, y las constructoras castellonenses Lubasa y Facsa para adjudicarse el 49% de Egevasa, que gestiona el servicio del agua de varios municipios de la provincia de Valencia. AVSA necesitaba absorber a Vainmosa si quería controlar el negocio del agua en la Comunidad Valenciana, sobre todo, a pocos meses de la renovación de la concesión del servicio de suministro de agua a la ciudad de Valencia, que representa más del 60% del negocio de la compañía hídrica. La concesión de Valencia, gestionada ahora por AVSA, expira en el año 2002, pero todo apunta a que el Ayuntamiento de la ciudad no esperará hasta entonces para renovar el contrato. El gobierno municipal, dirigido por la alcaldesa popular Rita Barberá, fue la responsable indirecta del conflicto en AVSA al declarar públicamente que no tendría ninguna posibilidad de renovar este contrato si la caja de ahorros y otros accionistas valencianos no aumentaban su participación en la sociedad hídrica. La última oferta puesta encima de la mesa, que algunos consideran la definitiva, es que AVSA absorberá Vainmosa Cartera y con ella Egevasa tras un intercambio accionarial. En este escenario, Bancaixa, con un 5%, sumaría en total un 15% de AVSA, porcentaje todavía distante del 25% al que aspiraba cuando estalló el conflicto societario el verano pasado. Lubasa y Facsa, que tienen un 25% de Vainmosa, se repartirían alrededor del 4% de AVSA. Esta propuesta obligaría a todos los socios a ceder parte de su capital. Así los franceses se quedarían con algo menos del 30%, el naviero Vicente Boluda reduciría su porcentaje al 8%, y el ahora BSCH se quedaría por debajo del 20%. En Bancaixa este escenario resulta poco atractivo. De hecho, el grupo crediticio valenciano insiste en que la propuesta anterior representaría una pérdida de dinero porque su participación en AVSA, en términos económicos, estaría unos 500 millones de pesetas por debajo de lo que la caja y las dos constructoras pagaron por la privatización de Egevasa. En Bancaixa se asegura, sin embargo, que las negociaciones están "muy avanzadas", pero precisaron que la entidad nunca suscribirá un mal acuerdo. La caja de ahorros pide una mayor participación. El acuerdo estaría pendiente de un intercambio accionarial más equilibrado. En parecida situación se encuentran las constructoras Lubasa y Facsa, que aspirarían a un porcentaje superior al 4% que ahora le atribuyen. Ayer Aguas de Valencia celebró un consejo de administración de trámite en Francia, país de origen del accionista mayoritario Bouygues, del que no salió ninguna novedad.

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