Gil: "Antic tiene que resucitar un cadáver"

Si la expedición del Parma se mostraba sorprendida por lo llevadero de la velada, en el Atlético se respiraba un clima de resignación ante la eliminatoria de la Copa de la UEFA. El mensaje conducía a poner los pies sobre la tierra y asumir que otra vez será. El técnico, Radomir Antic, apareció contento, distendido. Dijo que no vio que sus jugadores se "achicaran". "Todo lo contrario. Estoy muy conforme con la actitud de mis futbolistas", aclaró. El dueño del club, Jesús Gil, no parecía menos satisfecho: "No todo está mal, ya veis" -exhibió una botella de medio litro de un licor transparente- "al terminar el partido el árbitro me ha regalado esta botella de vodka". Antic quiso asumir su posible culpa tras la derrota: "Quizá la culpa sea mia porque he creado demasiadas espectativas"."Este equipo tiene internacionales hasta en el banquillo, y ha jugado un gran partido". Gil se refiría al Parma, y recordó el momento fatídico del penalti fallado por Juninho: "Quizá, si hubieramos marcado nos metíamos en el partido". Para víctimas, la de ayer fue claramente Juninho: él falló el penalti. Él fue objeto de los silbidos más contundente del Calderón. Pero el brasileño compareció con apariencia de entereza anímica, rojo tras la ducha, quizá reproduciendo las palabras de ánimo de Antic, que siempre le apoyó: "Si he fallado el penalti ha sido porque estaba allí, porque lo he pateado y me hago responsable de lanzarlos. Si no, no habría fallado nada". Juninho abrió los ojos, algo impaciente, respondió a la pregunta más difícil: ¿Qué le parece la actitud del público hacia usted?. "No me afecta, tengo personalidad y confianza para afrontar los malos momentos", respondió. A su salida de la sala de prensa, le esperaba Gil con los brazos abiertos, para consolarle. Juninho le devolvió el gesto con una palmadita en la barriga. Gil anduvo entre meandros: "Si el público protesta y silba a Juninho y a Jugovic, como dice la copla, el público siempre tiene razón... pero a mis jugadores yo los he visto luchar. Además, hay que atender a una cosa, Jugovic no está muy bien anímicamente, acaba de salir de una lesión y no es muy bien comprendido por el público. La verdad es que el míster tiene que resucitar a un cadáver que cogió demasiado tarde".

Dos jugadas de balón parado

El técnico del Parma, Alberto Malesani, admitió que su equipo practica mucho las jugadas a balón parado. "En Italia hemos metido varios goles de este modo", recordó. Y ayer, medio paso a la final de Moscú, se lo ganó en un centro tras una falta, y un córner. El primero lo remató Chiesa. El segundo, y tercer gol, lo apuntilló Crespo. "Creo que hemos pagado muy caros nuestros errores. Habló de los errores de los dos goles, porque no nos tendrían que haber marcado los dos goles de pelota parada", admitió Solari. El jugador argentino dijo que en el segundo, se sumaron una serie de infortunios: "El córner del segundo gol estuvo muy bien ejecutado por Verón, y para colmo, Chiesa mandó el balón al palo de un cabezazo con tan mala suerte para nosotros que el rebote le cayó en el pie".El otro héroe de la noche -parmesano, por supuesto- fue el portero Buffon. Ayer, no sólo le paró el penalti a Juninho. También se quejó del trato recibido por la prensa en España: "Hoy leí en un periódico que decían que yo estaba mal. Me gustaría encontrar ahora al periodista que escribió eso". Antic remachó su afirmación: "Es uno de los mejores porteros de Europa".

Empate en Marsella

Por otro lado, el Bolonia consiguió ayer un valioso empate sin goles en su visita al estadio del Marsella y salió fortalecido del primer asalto de la eliminatoria, que ahora se presenta cuesta arriba para el equipo francés. La firmeza de la defensa del Bolonia marcó el desenlace final del encuentro. Los zagueros del equipo italiano contrarrestaron siempre con eficacia los ataques del conjunto francés, que se intensificaron en el segundo tiempo pero no fructificaron