El Celta defiende su prestigio

Vuelve el Celta a Europa, un territorio desconocido para los vigueses hasta hace una semanas, pero en el que pueden presumir de haber alcanzado ya la gloria de un partido que será recordado durante muchos años. Inglaterra se ha cruzado de nuevo en el camino de los Víctor Fernández, esta vez representada por el Liverpool. Y el Liverpool, vaya bien o vaya mal, le sobren jugadores o acumule bajas, es más que un equipo, es una leyenda del fútbol y eso siempre ejerce un efecto intimidatorio sobre sus rivales. Tras la cura de humildad de Vitoria, Balaídos se llenará a reventar esta noche (21.30, TVE-1) para empujar a un equipo que defiende la flamante reputación alcanzada tras sus triunfos frente al Aston Villa y el Real Madrid.Hace sólo dos meses, parecería un insulto a la inteligencia preguntar por el favorito en un duelo entre el Celta y el Liverpool, entre un club que participa por segunda vez en la Copa de la UEFA y otro que ha ganado este torneo en dos ocasiones, además de cuatro copas de Europa y 18 ligas inglesas. Pero en dos meses el fútbol es capaz de demoler las mayores certezas históricas. Y lo sucedido en las últimas semanas pone al Celta claramente por encima del Liverpool. Los reds atraviesan una grave crisis que ha acabado con la destitución de uno de sus dos entrenadores, Roy Evans, y que ha llevado al club a romper una vieja tradición y entregar el mando del equipo a un extranjero, el francés Gerard Houllier. Por encima, el Liverpool se medirá al Celta con una grave fractura en su centro del campo por las bajas de McManaman e Ince, ambos sancionados.

El diagnóstico, sin embargo, queda matizado tras los resultados del último fin de semana, que por primera vez en mucho tiempo deparó buenas noticias al Liverpool. Houllier ha cambiado el tradicional 4-4-2 por un sistema de carrileros, y la apuesta funcionó estupendamente en Birmingham ante el Aston Villa, el mismo escenario donde el Celta enseñó a Inglaterra las credenciales del fútbol más bonito del campeonato español. Los reds batieron al líder de la Premier League en su estadio (4-2), y su ariete Robbie Fowler, todavía recuperándose de una grave lesión, reencontró su instinto para el remate y logró tres goles. "Esto es muy importante para Robbie", confesó Houllier, "porque no estaba en su mejor momento". Fowler, que forma la delantera junto al nuevo astro, Owen, admitió que aún no está a pleno rendimiento, pero que le hacía "mucha falta" un estímulo como los tres goles en el Villa Park.

Frente al reciente éxito de su rival, el Celta viene de sufrir su primera derrota en la Liga ante el Alavés. Eso no quiere decir gran cosa, porque la reacción del equipo tras caer en Balaídos con el Aston Villa permite conjeturar que el grupo de Víctor Fernández se encuentra en ese clásico estado anímico en que la fe de los jugadores es tan grande que ni siquiera las derrotas logran erosionarla. En cualquier caso, el pinchazo de Mendizorroza y el triunfo del Liverpool en Birmingham ayudan a poner los pies en el suelo. "Yo casi prefiero que las cosas hayan sucedido así", confiesa Víctor Fernández, "esto va a servir para que la afición y el propio equipo estén más centrados".

El técnico del Celta también puede variar su sistema para suplir las bajas de Míchel Salgado y Berges, ambos sancionados. Víctor medita prescindir del 4-4-2, alinear tres defensas centrales y colocar como carrileros a dos futbolistas muy ofensivos, Karpin y Tomás.

Celta: Dutruel; Eggen, Cáceres, Djorovic; Karpin, Mazinho, Tomás; Mostovoi, Makelele; Sánchez y Penev.

Liverpool: James; Mc Ateer, Babb, Staunton, Carragher, Bjornebie; Leonhardsen, Redknapp, Berger; Owen y Fowler.