Las lesiones acosan al Atlético en la "era Sacchi"
Más allá de sus problemas tácticos, que los tiene, o de la falta de calidad de su plantilla, que la acusa de veras, un mal acosa al Atlético desde la llegada al cargo de Arrigo Sacchi: las lesiones. Se le acumulan. Un nuevo jugador se unió ayer a la lista: Chamot, que estará entre dos y tres semanas de baja por culpa de una microrrotura fibrilar en su muslo izquierdo, sufrida el domingo en el partido ante el Oviedo.Pero el de Chamot no es un caso aislado. Durante la pretemporada hubo más ejemplos, aunque se trata de una época de lesiones frecuentes. Pero ya en plena competición, Kiko también sufrió un percance muscular. Y Lardín sigue en reposo por idéntico motivo. Pero no son sólo cuestiones musculares las que abarrotan la enfermería del conjunto rojiblanco. Por esguinces y distintos golpes, el Atlético ha tenido que prescindir de Torrisi, Juninho, Jugovic, Valerón y Serena.
Aunque puede tratarse de una simple coincidencia, la dureza impuesta por Arrigo Sacchi y su equipo de trabajo en los entrenamientos desde su llegada al club invita a relacionarla con el asunto, sobre todo en el caso de los percances musculares. La sobrecarga de partidos es un inconveniente difícil de esquivar para preparar adecuadamente a los jugadores y el organismo humano no es una máquina por mucho que se empeñen algunos preparadores físicos. Los jugadores del Atlético pueden estar pagando ahora la carga de trabajo que llevan a sus espaldas, el ritmo que imponen a sus partidos y a sus entrenamientos.
Por eso, desde la parcela técnica y médica del club, aunque nadie quiso pronunciarse ayer sobre el porqué de tanta reincidencia en las lesiones, se bendice el parón liguero que provocará el encuentro de la selección en Israel por el beneficio que el descanso reportará en los jugadores.
Lardín, uno de los afectados, atribuye a "la mala suerte" la lluvia de lesiones. "Te rompes cuando menos te lo esperas. Y no podemos culpar a la sobrecarga de partidos", añade, "porque llevamos sólo cuatro partidos . Y a la dureza de los entrenamientos, tampoco. Mala suerte, no hay más".
Por otra parte, Juninho se mostró crítico con la irregularidad del equipo. "Si queremos estar arriba", dijo, "no podemos perder partidos como éste. Hay que reflexionar y ver qué pasa. Estamos algo agobiados. Extrañan los continuos altibajos". Arrigo Sacchi, mientras, no concedió importancia a los reproches de Jesús Gil contra el juego del equipo. "Comprendo su enfado. Ahora nos toca a nosotros contestar las críticas con hechos, no con palabras".
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