Protesta mundial para acabar con la explotación de 120 millones de niños

Kailash Satyarthi es el coordinador internacional de la Global Marche, una protesta mundial contra la explotación infantil, que se ha extendido a los cinco continentes y que iniciará el 4 de mayo su recorrido por España. Según los cálculos que manejan los organizadores hay en el mundo casi tres mil millones de niños. 250 millones trabajan de manera impropia para su edad y 120 mil de ellos son explotados con grave perjuicio físico y psicológico.

Satyarthi explica que el 90% de los niños explotados se dedica a la agricultura. Y que el 10 por ciento restante se reparte en la industria, la construcción y la prostitución. Ésta última va en aumento. La favorece el turismo sexual, la mayor movilidad del capital y la emigración del campo a las ciudades. Naturalmente, Asia, Africa y Latinoamérica son las zonas donde el yugo del trabajo prematuro se concentra. Diversas organizaciones contra la explotación infantil están planteando la necesidad de que Occidente no consuma productos en cuya elaboración hayan intervenido niños. Algunas alfombras, concretamente, llevan ya la etiqueta Rugmark, que indica precisamente esto: ningún niño la ha tejido. Hay productos más o menos peligrosos en este sentido. Satyarthi cita la ropa -y la ropa de tipo deportivo, en especial- y las piedras preciosas. El trabajo de los niños parte de diveros supuestos. La miseria,el primero. El analfabetismo, el segundo. La responsabilidad paterna existe, pero se ve matizada por las estrategias de algunos empresarios. Estos intentan convencer a las familias pobres que la escuela es inútil y que el trabajo de los menores repercutirá positivamente en su nivel de vida. Cuando este tipo de persuasión no funciona hay otro mucho más contundente. Satyarthi describe así la situación de Surasia: "Hay 80 millones de niños trabajadores y 85 millones de adultos que no tienen trabajo. Es evidente que los adultos parados podrían ocupar el lugar de los niños. pero no lo harán porque los empresarios contratan mano de obra infantil, más barata y menos proclive a defender sus derechos". La Global Marche acabará en Ginebra entre el 2 y el 4 de junio coincidiendo con una conferencia de la Organización Internacional del Trabajo que pretende establecer las bases legales para eliminar la explotación de los niños.