El año del reencuentro

Llegó el día del estreno. Carlos Sainz debuta hoy al volante del Toyota Corolla para participar en la primera prueba del campeonato del mundo. El Rally de Montecarlo pone en marcha la temporada del reencuentro del piloto madrileño con la escudería que le catapultó a la gloria. Resulta un escenario incierto como siempre y Sainz, con su nueva apuesta, aparece como la mayor incógnita. Los rivales tampoco han cambiado mucho: Tommi Makinen y Mitsubishi, y Colin McRae y Subaru se encargarán de poner a prueba las posibilidades del campeón español.Paciencia. Sainz es conciso en su demanda al año nuevo. También pide suerte, como todos. Que no sufra los incidentes que le han apartado del éxito en las últimas temporadas. Quiere engordar su cuenta de victorias (lleva 20) y conquistar su tercer título (para sumar a los de 1990 y 1992) Tiene una gran ventaja: vuelve a casa y el Toyota dispone, como mínimo, de tantos medios como el que más (su presupuesto es de unos 5.000 millones de pesetas).

La marca japonesa regresa al Mundial a lo grande, después de dos temporadas sin competir oficialmente. Carlos Sainz es su estandarte, aunque permanece cauto ante el estreno. "Está claro que pienso en luchar por cada victoria", dice. "El coche tiene posibilidades, pero es nuevo y no conoceremos su nivel hasta que nos enfrentemos a los demás en los tramos. Y ni siquiera Montecarlo va a ser indicativo porque intervienen las circunstancias meteorológicas y los neumáticos".

Sainz, de 35 años, y su copiloto Luis Moya están tan ansiosos como sus aficionados. Hoy mismo empezarán a salir de dudas. La primera etapa del Rally de Montecarlo, con seis tramos y 120 kilómetros cronometrados, ofrecerá las primeras conclusiones. La carrera ha variado su recorrido -no habrá noche del Turini-, pero mantiene las características. Y tanta hambre de volante como Sainz tienen sus rivales. Makinen defiende su título y McRae se presenta como alternativa. Ambos afrontan 1998 con las mismas armas que el año pasado.

El finlandés busca ser el primer piloto en ganar tres campeonatos consecutivos, el escocés quiere proseguir la racha triunfal con que acabó 1997 -se impuso en las tres últimas carreras-, y también cuentan en los pronósticos dos veteranos como el francés Didier Auriol, compañero de Sainz en Toyota, y el finlandés Juha Kankkunen, líder del equipo Ford, el cuarto en discordia en el Mundial.