Geopolítica del sorteo
Para Francia, su Mundial comenzará el próximo jueves, exactamente a las 16.45, cuando las selecciones de Europa y resto del Mundo -un jugador por cada uno de los 32 países clasificados: por España, Hierro-, elegidas por Beckenbauer y Carlos Alberto Parreira, se enfrenten en el Estadio Velódromo de Marsella. Después, a las 18.15, en las gradas del estadio, comenzará el sorteo propiamente dicho, interrumpido por varias actuaciones musicales y con presencia de viejas glorias.Eso será lo que se vea, lo aparente, pero lo importante con respecto a la formación de los ocho grupos de cuatro sucederá mañana martes, y de una forma bastante más oculta, en una reunión del comité de la FIFA. Será la geopolítica del sorteo.
La cuestión de los ocho cabezas de serie se antoja peliaguda. Brasil, Francia, Argentina, Italia, Alemania y España son seguros. Atendiendo al potencial de los demás equipos y a su actuación en pasados Mundiales, Rumania y Bélgica deberían completar el lote, pero el deseo de la FIFA de premiar los avances africanos haría que Nigeria -actual campeón olímpico- ocupara una plaza, en competencia con Camerún, el que mejor historial posee en el Mundial, y Marruecos, el mejor colocado en la clasificación FIFA. Eso dejaría una plaza para Bélgica o Rumania, ante la oposición de Inglaterra, que reivindica su posición en la clasificación FIFA.
La composición de los bombos, una vez colocados los cabezas de serie, también tendrá su punto de negociación para evitar las coincidencias geográficas y la colocación según su potencial deportivo. Como Europa presenta 15 equipos, será imposible que no repitan: en siete grupos habrá dos selecciones del Viejo Continente.
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