Terroristas islámicos asesinan a tiros y cuchilladas a 57 turistas en Egipto

Un comando terrorista convirtió ayer un antiguo templo de la ciudad egipcia de Luxor en el escenario de la peor matanza ocurrida en ese país desde que afloró la violencia de orientación islámica: 67 personas, incluidos 57 turistas extranjeros y 6 de los atacantes, murieron en los 45 minutos que duró una orgía de terror que ha conmocionado al mundo y que ha amenazado el futuro de lo que hasta ahora era uno de los principales destinos turísticos. Los muertos identificados anoche eran dio nacionalidad suiza, japonesa y británica. Las autoridades confirmaron que entre las víctimas no había ninguna de nacionalidad española.

El Gobierno egipcio atribuyó la matanza a la Gamaa Islamiya, el grupo integrista más activo de Egipto, responsable también de la mayoría de los actos terroristas ocurridos en ese país en los últimos cinco anos. Según testigos y portavoces egipcios, los atacantes dispararon a quemarropa varias ráfagas sobre los turistas que visitaban el templo de Hatshepsut del Valle de los Reyes, en la ribera occidental del Nilo, a unos 700 kilómetros al sur de El Cairo, uno de los lugares preferidos por los visitantes extranjeros. Los integrantes del comando tuvieron tiempo de rematar a cuchilladas a algunos de los heridos antes de huir a bordo de uno de los autobuses que habían trasladado a los turistas. La policía consiguió, no obstante, dar caza a los terroristas, seis de los cuales resultaron muertos en la refriega. Las fuerzas de seguridad no precisaron si ésos eran todos los miembros del grupo asesino o si algunos otros habían conseguido esconderse. Operadores turísticos de varios países europeos cancelaron inmediatamente sus viajes a Egipto. En España, las agencias de viajes recibieron ayer numerosas llamadas de clientes que querían suspender sus vuelos a ciudades egipcias después de que los operadores les advirtieran que no asumen los riesgos del viaje. Bill Clinton, el secretario general de Naciones Unidas y otros dirigentes enviaron condolencias al presidente Hosni Mubarak, quien ha visto trágicamente con firmada con esta acción la grave amenaza del radicalismo islámico para Egipto.